¿Invertir en paneles solares?
El poder de la pluma
Es la pregunta que más me han hecho recientemente. Las personas que ya invirtieron en un generador fotovoltaico para sus casas o para sus pequeños negocios, o que están pensando hacerlo pronto, se encuentran preocupados e inquietos.
Cubrir el costo que tienen los paneles solares, inversores y demás insumos y mano de obra que se necesitan para poder generar en sus propios techos, de manera limpia y sostenible, la electricidad que demandan para satisfacer sus necesidades más esenciales, sigue representando un gran esfuerzo personal a pesar de lo mucho que han bajado los precios de estos sistemas. Por ese motivo, no quieren jugárselo en un volado.
No les faltan razones, al menos para estar alerta e investigar, ya que están siendo testigos de una histórica, incomprensible y absurda cruzada que ha emprendido el Ejecutivo Federal de nuestro país en contra de la generación de energía barata, eficiente, segura, confiable, limpia y renovable. Y aunque debemos reconocer que la generación distribuida, que es aquella que se realiza en el mismo sitio en donde ha de ser consumida, la que usted y yo podemos generar desde la azotea de nuestras casas u oficinas con paneles solares de momento no se ve afectada por las reformas a la Ley de la Industria Eléctrica que promueve el presidente, la realidad es que la sola incertidumbre y desconfianza que generan estas equivocadas políticas públicas ya han impactado negativamente al sector, al generar temor de que las inversiones puedan quedar sujetas al riesgo de perderse.
Ante esto, es de gran importancia afirmar con claridad y de manera contundente: la inversión en paneles solares para generar energía eléctrica de pequeña escala en casas, oficinas y otros negocios e industrias no corre ninguna clase de riesgo actualmente.
Además, es el mejor momento para hacer ese tipo de inversiones, puesto que, de aprobarse en el Senado y entrar en vigor las reformas propuestas, es alta la probabilidad de que las tarifas de electricidad se incrementen a corto plazo, y estos proyectos son y seguirán siendo el mejor instrumento para hacer rendir mejor el presupuesto familiar en el hogar, o para incrementar la competitividad y rentabilidad de la pequeña y mediana empresa mexicanas.
Sería fabuloso que podamos incrementar sustancialmente y a una velocidad nunca antes vista el despliegue de cientos de miles de pequeños proyectos, ya sea solares o eólicos de menos de 500 KW de capacidad instalada. Con esto, podríamos demostrar fehacientemente el poder que tienen las masas, que con la suma de una enorme cantidad de pequeñas acciones individuales son capaces de lograr muy grandes cambios favorables, que a todos benefician.
No dudemos, si tenemos la posibilidad técnica y económica, generemos electricidad limpia y barata en el mismo lugar en donde la necesitamos, esto no es sólo un alivio para tu cartera, sino que es una contribución muy benéfica para toda la humanidad.