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Ante la amenaza del regreso al semáforo rojo por la alta letalidad de la pandemia que tiene a nuestra entidad con una sensación de derrota o resignación, recomiendo revisar el comic brasileño Daytripper de los artistas Gabriel Bá y Fábio Moon, cuya trama central es la revisión de las decisiones que hemos tomado a lo largo de nuestra vida, la valoración de los pequeños momentos que acaban por convertirse en hechos significativos y los errores que, en vez de transformarse en una experiencia, acaban por sepultarnos en la desidia y la derrota.

Lejos de recomendarles una lectura fatalista, este cómic que la editorial Vértigo publicó en 2010 tiene una vitalidad sorprendente, porque la narración, pese a los hechos que presenta, está cargada de esperanza y deja en el lector una sensación de gozar de una segunda oportunidad en la vida. Cuando seguimos al protagonista Brás de Olivia Domingos en su travesía vital compuesta de muerte, amor, desilusiones, triunfos y fracasos, las enseñanzas que deja son compartidas, porque junto con él miramos sí en verdad hemos hecho lo posible por sanar o superar esas experiencias.

El protagonista, hijo de un famoso escritor, trabaja de redactor de esquelas en un periódico mientras espera cumplir su sueño de convertirse en escritor, aunque, antes de alcanzar esa meta, Brás de Olivia descubrirá cómo los pequeños hechos cotidianos son capaces de darle un giro a nuestra biografía. En cada capítulo analiza una emoción, con la peculiaridad de que cada entrega acaba con la muerte del protagonista, cerrando un ciclo, para colocarlo en la siguiente historia en otro momento y otro dilema.

Cada uno de los temas asemeja un cuadro de nuestro pensamiento, una crónica sobre las sensaciones de nuestro primer viaje, la esperanza del primer amor, la pérdida de amigos y familiares. El cierre de capítulo termina con la muerte del protagonista en un momento importante de su vida: cuando va a cumplir su gran sueño o anhelo, muere de manera trágica e inesperada, dejándonos las preguntas: ¿has hecho lo que has querido? ¿Eres feliz con todo lo que has logrado? ¿Estás en el lugar que deseas?.

Esta obra nos obliga a replantearnos nuestras relaciones, metas y sueños, ya que al mirar el recorrido del protagonista para convertirse en escritor, empezando como redactor de esquelas mientras su padre goza de los privilegios del mundo cultural gracias a una carrera literaria sólida; de la sensación de pérdida al terminar una relación de siete años con una mujer que conoció en un viaje, debido a la monotonía, el subsecuente luto emocional y la nueva oportunidad al abrir la puerta a otra relación, nos orilla a cuestionar qué tanto hacemos para alcanzar nuestra felicidad.

Independientemente si deciden leerlo o no, esta contingencia, pese a lo desolador de su desarrollo, no sólo significa una transformación de nuestra realidad, también es un momento de meditar nuestra historia personal, de revisar cuántos sueños y deseos hemos logrado, porque al final sólo esos recuerdos y fragmentos de felicidad podremos llevarnos, con la certeza que nadie podrá quitárnoslos.

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