La Columna Viernes Cultural guarda en su falda, que también la tiene bien puesta, el amparo que le tramitó El Transcriptor minutos antes de sentarse a beber su espresso doble y leer las notas rojas de estos días, sobre todo la relativa a la maestra doña Rosario, por aquello de la “Estafa Maestra”, que la ha vinculado a un proceso judicial y le abrió las puertas de Santa Martha Acatitla.

La investigación fue muy interesante, según las notas de prensa: “73 convenios revisados, 186 empresas investigadas y 7 mil 670 millones de pesos entregados en contratos ilegales”; “El desvío de recursos lo hicieron once dependencias, tan variadas como la Secretaría de Desarrollo Social o Petróleos Mexicanos, y contó con ocho cómplices: universidades públicas que cumplieron el papel de intermediarias y se quedaron con una comisión de mil millones de pesos por jugar este rol”, entre éstas figura la Universidad Autónoma del Carmen; todo empezó con la revisión de la Cuenta Pública 2013, a cargo de la Auditoría Superior de la Federación.

El Transcriptor piensa que doña Rosario ha de estar pensando a su vez que la justicia, que debe ser pronta y expedita, según el ideal de nuestro sistema de gobierno, tarda pero llega; el asunto periodístico data de 2017 y apenas ahora en 2019 se avanzó un poquito, se vinculó a proceso a una de las involucradas de acuerdo con información de la fiscalía. Nada grave aún para la ex titular de Sedesol, excepto que ya duerme, es un decir, en el referido centro femenil de readaptación social, inaugurado en 2004 por el entonces jefe de Gobierno de la Ciudad de México, y hoy líder indiscutible de la 4T.

En Santa Martha Acatitla también han dormido, conforme a reportes periodísticos: Juana Barraza Samperio, “La Mataviejitas”, sentenciada a 759 años de prisión por la comisión de entre 42 y 48 homicidios contra mujeres de la tercera edad; Mónica García Villegas, dueña del colegio Enrique Rebsamen, acusada por la muerte de 26 personas tras el colapso de la escuela durante el sismo del 19 de septiembre de 2017; Sandra Ávila Beltrán, “La Reina del Pacífico”, cercana colaboradora del Cártel de Guadalajara; Esperanza Gutiérrez, quien presuntamente participó en el homicidio de dos ciudadanos israelíes en la plaza comercial Artz, y otra maestra, Elba Esther Gordillo, recluida por malversación de fondos.

No son las únicas famosas que han estado en prisión, apunta el también prócer de los viernes, e informa que han sido privadas de su libertad, por diversas causas: la cantante española Isabel Pantoja, la mexicana Paulina Rubio, la millonaria Paris Hilton, la mexicana Claudia Ochoa Félix, alias “Emperatriz de Los Ántrax”; la italiana Anna Maria Licciardi, del “clan Secondigliano de la Camorra, en Nápoles”, y, ¡Oh, my God!, Gloria Trevi y Britney Spears.

Como observarás, querida, dice el erotómano de su vida, en asuntos de justicia, Themis cuida los criterios de equidad de género, aunque mujeres u hombres que delinquen son igualmente esperados para dormir, en cama o en hamaca, en las cárceles mexicanas.

De nada… Saludos…