Empujado principalmente por la llegada de inversión privada a Yucatán, el sector de la construcción ya mostró mejoría en el primer trimestre del año. Sólo en los meses de enero, febrero y marzo, el valor de la producción de las empresas del sector de la construcción logró 2,219 millones de pesos. Un incremento del 22 por ciento, comparado con el primer trimestre del año 2022.

Cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) revelan que en enero de este año se lograron 674.1 millones de pesos; en febrero 712.2 millones de pesos; y en marzo 832.8 millones de pesos, lo que habla del empuje en el sector de las inversiones privada en infraestructura, además de la inversión pública que detonan en la entidad los tres niveles de Gobierno.

En ese tenor, el sector de la construcción yucateca espera que todo el primer semestre del año sea de crecimiento, luego que desde antes de la pandemia de coronavirus ya mostraban números a la baja.

En Mérida, su zona conurbada y el interior del Estado, está ocurriendo un dinamismo en la economía y en especial en la infraestructura en general. Todo esto de la mano de la certeza jurídica que permite un ambiente favorable a las inversiones como fábricas, centros logísticos, vivienda y centros comerciales.

Apenas al arranque de la semana pasada, la Secretaría de Fomento Económico (Sefoet), confirmó la llegada de 1,000 millones de dólares para el sector inmobiliario de Yucatán. Se habla de desarrollos de vivienda residencial y residencial plus, centros comerciales, campos de golf, hoteles y torres de condominios de lujo.

El propio dirigente de la CMIC, Raúl Monforte González, destacó que la inversión en infraestructura no sólo beneficia a las constructoras, sino que permite el desarrollo de otros sectores como el industrial, comercial, agropecuario, con nuevas carreteras, con energías, todos esos sistemas económicos funcionan mejor con buena infraestructura.

NOTA BENE…

A más tardar en octubre, el PRI yucateco estará anunciando a su candidato al Gobierno de Yucatán, por lo menos fue la promesa hecha el fin de semana por Alejandro “Alito” Cárdenas Moreno, en su visita a la ciudad de Mérida. El nombre del senador tricolor, Jorge Carlos Ramírez Marín, volvió a sonar con fuerza en el corazón de los priistas y también ex priistas que hoy conforman las huestes de Morena.