Las ciénagas son ambientes de aguas pantanosa y poco profunda, sin embargo, llegan a tener pequeños incrementos debido a las lluvias. Estas formaciones tienen cercanía a las costas, lo que permite el desarrollo de diversas especies de aves y vegetación acuática, que veces es muy densa. Algunas de las especies que podemos encontrar en estos ambientes son flamencos, garzas, patos, entre otros, según informa el Dr. Juan Chablé Santos, profesor-investigador de la Facultad de Medicina, Veterinaria y Zootécnica de la Uady.

Las aves que habitan en las ciénagas son especies migratorias y filtradoras, las cuales se pueden encontrar en diversas zonas de la costa yucateca en diferentes épocas del año. Su estadía suele variar dependiendo de las condiciones en las que se encuentren los habitas. La presencia de las especies ayuda al desarrollo de la flora y fauna en las ciénagas, lo que permite que los ecosistemas permanezcan en buenas condiciones.

En particular, el flamenco tiene estrategias de vuelo, ya que cuando lo realiza sus vuelos en parvadas en forma de V, por lo general son largos y migratorios, lo que intentan es disminuir la contra del viento, romper la columna del aire. Van cortando el viento con un individuo en la punta y el aire esta pasa a los lados, para vuelos muy largos el líder se cansa porque está al frente y por lo que se ubica atrás y el que continúa toma su lugar. El especialista nos aclara que los vuelos en forma de V no se dan mucho en la costa de Yucatán y nos recuerda que son para vuelos muy largos, pero se da otra formación; la línea, que es cuando vemos que los flamencos están cruzando muy bajo a nivel de la playa y las trayectorias suelen ser más cortas.

El flamenco es un organismo filtrador que se alimenta básicamente de microorganismos de origen tanto animal como vegetal. En la zona se producen una gran cantidad de crustáceos, como es la artemia salina, que le da el color rosado o rojo a dicho ecosistema, parte ello ofrece la pigmentación rosa de los flamencos. Con su cuello largo sumergen la cabeza en el agua entrando con la parte delantera del pico, mientras van juntando los microorganismos que luego tragan, esto lo hacen moviendo las patas en el lodo, y así agrupar a los microorganismos.

A los flamencos se les conocer como los arquitectos de los manglares, ya que ellos mueven el sedimento, cuando se van del lugar se puede observar ciertas ondulaciones en forma de volcán, al mover el sedimento hacen que salga el fósforo y los contaminantes como el plomo. El ciclo natural del fósforo cuando cae en el manglar llega hasta al fondo en donde se mantiene, salvo en eventos como las marejadas y huracanes que mueven el sedimento, el flamenco al mover el lodo reproduce este ciclo. Lo que nos recuerda la importancia del ciclo del fósforo y el nitrógeno, que son elementos básicos para que el ecosistema pueda estar sano.

El experto nos recuerda que en el sedimento que mueven los flamencos esta un componente químico: plomo, que es un producto de la consecuencia de la práctica de la caza cinegética que utilizan las mostacillas de plomo, las balas contaminan al caer en la ciénaga, manteniendo ser y siendo ingerido por los flamencos, pero no sólo afecta a las aves, sino que también a los peces y a toda la cadena trófica, por lo que sugiere que si van a practicar la caza utilicen balas de acero que son menos contaminantes.