El 8 de marzo se conmemora en el mundo el Día Internacional de la Mujer, por la igualdad, el reconocimiento y ejercicio efectivo de sus derechos. El pedido por una justicia antipatriarcal. Recordemos que el 8 de marzo de 1908 un acontecimiento marcó la historia del trabajo y la lucha sindical en el mundo. Un grupo de 129 mujeres murieron en un incendio en la fábrica Cotton, de Nueva York, Estados Unidos, luego de que se declararan en huelga en su lugar de trabajo. Las malas condiciones de trabajo y la desigualdad laboral entre hombres y mujeres fueron el motivo por el cual estas mujeres se declararon en huelga.

El dueño de la fábrica ordenó cerrar las puertas del edificio para que las mujeres desistieran y abandonaron el lugar, el resultado fue la muerte de las obreras que se encontraban en el interior de la fábrica. Con este antecedente, dos años después, en 1910 se desarrolló la conferencia internacional de mujeres socialistas en la capital danesa Copenahague. El tema central fue el sufragio universal para todas las mujeres y por moción de Clara Zetkin, líder del levantamiento, se proclamó oficialmente el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer trabajadora en homenaje a las mujeres caídas en la huelga en 1908. Más cerca del tiempo, en 1977 la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) designó oficialmente el 8 de marzo el Día Internacional de la Mujer, en dicha fecha se recalca la desigualdad de género y la lucha por la igualdad efectiva para las mujeres en distintos rubros.

Es doloroso pensar en la lucha que diariamente la mujer tiene que librar. Por siglos la desigualdad de géneros ha sido la bandera con que el mundo ha navegado. Cerrar los ojos ante esta problemática es como querer tapar el Sol con un dedo. La discriminación que la mujer sufre a nivel mundial es real, existe, y en algunos lugares se ha normalizado a tal punto, que la propia mujer piensa que es completamente natural que un hombre la maltrate, porque su religión así lo dictamina: “la mujer nació para sufrir” es lo que expresan cientos de mujeres subyugadas en el mundo. La Organización de las Naciones Unidas en diferentes informes publicados nos muestra cómo la brecha entre el hombre y la mujer sigue siendo considerable. Las mujeres tienen menos acceso a los servicios sociales que los varones, las mujeres ganan menos dinero que los varones por realizar el mismo trabajo y aun las que tienen educación consiguen trabajos de menor jerarquía.

Reflexionemos un poco, ¿sabías que existen 39 naciones en las que los hijos varones tienen derecho de herencia que las hijas mujeres no? Y bueno, sólo el 2% de la tierra del planeta pertenece a mujeres mientras que el 98% corresponde a los hombres. ¿Sabías que en 30 países se continúa realizando la mutilación genital femenina y hay por lo menos 200 millones de mujeres operadas?, ¿sabías que en México hay 11 feminicidios al día?

Hoy como ayer y mañana decimos a voz en cuello: ¡YA BASTA!