Enfermedades reumáticas a la alza

Jacinto Herrera León: Enfermedades reumáticas a la alza.

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El próximo 12 de octubre se conmemorará el “Día mundial de las enfermedades reumáticas y artritis”, que de forma concatenada atrae a la mente un sinnúmero de imágenes de todos aquellos doliente que son o han sido víctimas de alguna de las cerca de 200 enfermedades en adultos y 150 en niños que afectan al tejido conjuntivo que conforma las articulaciones, ojos, corazón, riñón, pulmón, etc.

Una vez más, se intenta sensibilizar a la población y a las instancias gubernamentales sobre el número, variantes y alcances de estas enfermedades, que al día de hoy, siguen siendo un reto para quienes aún, de una manera u otra, fingen demencia cuando de atención integral se refiere.

Vivencias sobran, como la de Juanita de tan solo 9 años, quien es presa de artritis juvenil desde los 4 años: “Nadie quería jugar conmigo y decían: esa niña está enferma, te va a contagiar, o cosas así de niños”. La ignorancia de los padres, e inadecuada preparación en la materia de algunos médicos que la atendieron, fueron los verdugos de quien ahora, y en pleno siglo XXI, es víctima de la marginación.

Ante el vocablo reumatismo, nuestra mente aún evoca imágenes de dolor, falta de movilidad, incapacidad y no en pocas ocasiones en la muerte. Para que tenga usted una idea de sus alcances; el 14% de la población mexicana. Luego entonces, ante la falta de gente docta en la materia, la estrategia seguirá siendo la información. No dije de la prevención, toda vez que la mayoría de estas enfermedades tiene un origen genético (defectos en alguna parte de los cromosomas) y precisamente por eso no tienen cura. Pero que no le quepa la menor duda de que en buenas manos, tienen control.

Con cerca de tres décadas de experiencia como reumatólogo, a un servidor, le sigue asaltando la impotencia profesional, cuando veo gente que en plenitud de su juventud y durante esos años maravillosos de vida productiva (reproductiva y laboral) se ven cimbrados ante la presencia de lesiones irreversibles.

El escenario de los costos económicos y sociales, tristemente, aún son oscuros. No en balde ocupan el nada honroso tercer lugar de gasto acumulado o dinero invertido en forma directa (compra de medicamentos y hospitalización), o indirecta (incapacidades, tiempo de rehabilitación, tiempo con la familia, crecimiento laboral a futuro), lo que las convierte en uno de los problemas más caros del planeta.

Categóricamente te aseguro que sólo con esfuerzo y tesón conjunto, evitaremos ver pacientes sin trabajo por su enfermedad, o a tu hijo privado de la sana convivencia familiar, y potencialmente limitado de ese futuro mejor que hoy construyes, y por justicia se merecen. Por un Yucatán con menos reumáticos, súmate a nuestra cruzada por el cocimiento y equidad de información de las enfermedades reumáticas que aquejan al mundo, a México y nuestro Yucatán.

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