I nvertir no es un lujo: es una necesidad. Si no invertimos de manera correcta y diversificada, la inflación diluirá el poder adquisitivo de nuestro dinero. Además, es fundamental para alcanzar nuestras metas financieras y asegurar un futuro estable. Sin embargo, muchas personas luchan para ahorrar de manera consistente. Aquí es donde entra en juego la inversión automática. En este artículo, exploraremos qué es y cómo puedes aprovecharlo al máximo.

¿Qué es la inversión automática?
La inversión automática es una estrategia que te permite apartar una parte de tus ingresos de forma regular sin tener que pensarlo demasiado. En lugar de depender de tu fuerza de voluntad para transferir dinero a tu cuenta de inversión, configuras cargos automáticos que se realizan en fechas específicas. Esto garantiza que ahorres de manera constante sin esfuerzo adicional.

Beneficios de la inversión automática
1. Disciplina financiera: el ahorro automático te ayuda a mantener la disciplina financiera. No importa si tienes un buen o mal día: los cargos automáticos se realizan sin falta.

2. Metas a largo plazo: si estás ahorrando para comprar una casa, un auto o para tu jubilación, la inversión automática te acerca a esas metas sin que te des cuenta.

3. Beneficios fiscales: en algunos casos, las cuentas de inversión automática te permiten obtener ciertos beneficios fiscales, como la deducción. ¡Puedes hacer que tus aportaciones a tu fondo de inversión sean deducibles de tus ingresos!

4. Montos: usualmente las operadoras de fondos, aseguradoras, bancos y otras instituciones que ofrecen este producto te permiten entrar desde montos tan pequeños como 2 mil pesos al mes.

Cómo implementar la inversión automática
1. Evalúa tus ingresos y gastos: decide cuánto puedes invertir sin afectar tu calidad de vida. Como regla general, en nuestra firma aconsejamos invertir entre el 10 y el 15% de tus ingresos después de impuestos para garantizar el nivel de vida al que estás acostumbrado.

2. Elige una cuenta de inversión: abre una cuenta de inversión específica para este propósito. Busca una cuenta con una amplia gama de fondos de inversión a los que puedas tener acceso y asegúrate de que te ofrezcan un portal de banca por internet, para poder evaluar el desempeño de tu cuenta. En algunos casos, las instituciones también ofrecen bonos de bienvenida, así que ¡aprovéchalos!

3. Elige dónde deseas que te carguen: usualmente se puede cargar a la cuenta bancaria o a la tarjeta de crédito que designes. Puedes configurar cargos mensuales, trimestrales y semestrales (en algunos casos incluso hasta anuales).

4. Ajusta según tus ingresos: si recibes un aumento o un bono, ponlo a trabajar depositándolo en tu cuenta. Esto te ayudará a ahorrar más sin esfuerzo adicional. La inversión automática es una herramienta poderosa para construir un futuro financiero sólido. Recuerda que cada pequeño paso cuenta. Empieza hoy mismo y asegura un mañana más próspero. ¡Tu yo futuro te lo agradecerá!

NOTA: las opiniones expresadas en este artículo son únicamente informativas y no constituyen asesoramiento financiero personalizado.