José Salazar/Mérida
En Yucatán ha crecido la donación voluntaria de sangre, pero también la demanda de productos plaquetarios, lo que hace necesario continuar incrementando la cultura de la donación altruista entre la población.

En 2018, el Centro Estatal de Transfusión Sanguínea (CETS) de Yucatán registró 13 mil 54 casos, de los cuales dos mil 605 fueron voluntarios, es decir, el 20 por ciento. En 2017, los donantes voluntarios fueron el 18 por ciento.

Este año, hasta el pasado 10 de junio se tuvo cinco mil 667 donantes, de los cuales acudieron de manera altruista mil 157, manteniéndose la tasa cercana al 20 por ciento.

“Si bien nos hemos mantenido en porcentaje de donantes voluntarios y no tenemos desabasto de sangre, sí requerimos que sean más los altruistas, ya que es la más segura”, explicó la directora del CETS, Martha Montemayor Curiel.

Precisó que el crecimiento de la ciudad, y en consecuencia, el aumento del parque vehicular, han condicionado que haya más accidentes de tránsito, por lo que consideró que estos factores han incrementado la demanda de unidades de sangre por día; antes salían del banco de sangre 30 por día, la demanda ahora es de 50.

Agregó que México cumple con la tasa de donación altruista establecida por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de Salud (OMS) para 2020, que es del 20 por ciento, pero hace falta incrementarla, ya que es la base para el éxito de todo programa de sangre segura.

Acerca de las personas que más demandan sangre, Montemayor Curiel explicó que son los pacientes con cáncer, sobre todo los de oncología pediátrica; por tanto, se requiere que no solo sus familiares donen, sino que la sociedad se una a esta noble causa, ya que todos, en cualquier momento, pueden necesitar sangre.

“La donación de sangre puede realizarse durante el año. Un hombre puede donar hasta cuatro veces por año y una mujer, tres. Hemos crecido, pero hay mucho por hacer. También se demanda mucho las plaquetas, la donación de aféresis plaquetaria nos permite cubrir las necesidades de pacientes con leucemia, principalmente”, indicó la directora del CETS Yucatán.

Mencionó que este tipo de donación es más prologada, dura alrededor de 40 minutos y solo se extraen plaquetas, “pero se requiere una adecuada red venosa, generalmente los hombres cuentan con mejores venas que la mujeres para este tipo de donación”.

Con motivo del Día Mundial del Donante de Sangre, que se celebra el 14 de junio, en Yucatán en vez de realizar un solo evento, durante todo el mes se realizan campañas de donación voluntaria en empresas, instituciones y universidades.

“Para finalizar el mes tendremos un evento masivo de donación de sangre; estamos definiendo el lugar, tentativamente sería en el Centro de Convenciones Siglo XXI”, consideró.

El evento denominado el “Donatón” se realizará desde la mañana hasta la noche y se contarán para ello con el Dona Móvil, que es una unidad habilitada para la captación de sangre.

También se contará con la participación de las asociaciones civiles que apoyan la donación altruista de sangre. “Preferimos esta vez, de acuerdo con las políticas actuales, hacer más con menos, enfocarnos no tanto en celebrar, sino en la captación de sangre voluntaria. Contamos con el apoyo del Gobierno del Estado y la Secretaría de Salud”, explicó.

Recordó que el Día Mundial del Donante de Sangre es una fecha para dar las gracias a los donantes voluntarios no remunerados por un regalo que permite salvar vidas, así como para crear conciencia de la necesidad de hacer donaciones regulares para tener acceso oportuno a la sangre y productos sanguíneos seguros y de calidad, como parte integral de la cobertura sanitaria universal y componente fundamental de los sistemas de salud eficaces.

“La idea es que la sangre espere al paciente y no él a ella, por eso invitamos a toda la sociedad a unirse y entregar sangre de forma altruista, ya que es la más segura y salva vidas”, insistió.

Además, dijo, se tiene la ventaja de que al donar se analiza su sangre para detectar hepatitis, enfermedad de Chagas, VIH y sífilis. Los donantes altruistas son los que más cuidan su salud.