Luis Fuente/SIPSE
MERIDA, Yuc.- En Yucatán hay una cultura de la usura y el desconocimiento de cómo cuidar el patrimonio para evitar que por una deuda, que al inicio es pequeña, pero se convierte en impagable, una persona pierda su casa.

Sobre este asunto, el presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado, Marcos Celis Quintal, señaló que se ha detectado que en los municipios que se dedican a la usura y van casa por casa para presionar a la gente a obtener un crédito y los hacen firmar pagarés que luego se vuelven impagables.

Explicó que esto le hacen de manera particular o abren negocios de los llamados de apoyo económico.

“En muchas ocasiones los usureros ya tienen ubicadas las casas que les gustaría obtener y revender, por lo que incluso cuando el deudor trata de pagar, ya no aceptan el dinero, pues ya tienen comprador”, expresó.

Esto sucede en las zonas en donde hay un mayor movimiento económico, muestra de ello es que cuando el Juzgado de Tekax llevaba todos los procesos del sur del Estado, era enorme la carga de trabajo, pero en cuanto se abrió un tribunal mixto en Ticul, ahí se concentraron los juicios de este tipo, agregó.

Lo mismo sucede en los tribunales de Tizimín y Valladolid, donde hay mucho movimiento económico, al igual en Mérida,

Los dedicados a la usura normalmente piden como garantía las escrituras de la casa, por lo que al volverse impagable el crédito promueven juicios extraordinarios civiles para hacerse del inmueble.