Inquebrantable sacrificio de una madre en la lucha por la salud de su hija
Conoce esta historia que es ejemplo de amor incondicional en este Día de la Madre
MÉRIDA, Yuc.-En este Día de la Madre, la señora Norma Alicia Guazosón Mozo, de 53 años de edad, oriunda de Valladolid, es un ejemplo de una mujer valiente y dedicada que se encontró en una situación difícil: su hija Valentina fue diagnosticada con cáncer.
Desde el momento en el que recibió la noticia, dejó de lado todo en su vida para dedicarse por completo al cuidado de su hija, historia que nos compartió.
Nos comentó que Valentina, quien actualmente tiene 14 años de edad y cursa el segundo grado de educación secundaria, comenzó a presentar síntomas a los 12 años de edad.
“Me decía que se sentía muy cansada, dejó de comer y comenzó con un dolor de garganta. En ese entonces, la llevé al médico quien le recetó un antibiótico y aparentemente quedó bien, pero luego comenzó con fiebre que no se controlaba”, detalló.
Cuando la llevé de nuevo al médico, continuó, le hicieron unos estudios en los que salió que sus defensas estaban en cero.
“De ahí nos enviaron al hospital de Valladolid y luego al Hospital O’Horán para hacerle más estudios y al final, le diagnosticaron leucemia”, recordó.
Esfuerzo por su hija
Norma Guazosón rememoró que enterarse de que su hija tenía cáncer fue muy difícil para ella, debido a que con trabajos de costura y venta de chicharrones, bolis y otras botanas que realiza en su casa, sostiene a su hija y lo complementa con la pensión que recibe del padre de la menor, del cual está divorciada.
“Fue duro porque no tenía cómo pagar un tratamiento que es muy caro. Pero los doctores me dijeron que en el Hospital O’Horán no se cobra. Mi vida cambió a partir de ese entonces porque me dediqué por completo a Valentina y a su recuperación”.
“Ella comenzó a recibir quimioterapia desde agosto de 2022. Venimos a Mérida cada mes y nos quedamos unos tres días en el albergue de Amanc Yucatán. Aquí nos han ayudado mucho porque al principio cuando nos enviaron a Mérida por los estudios para poder diagnosticar a mi hija, nos quedamos en el albergue casi ocho meses”, comentó.
A pesar del dolor y el miedo que enfrentaba al inicio, nunca vaciló en su compromiso de estar al lado de su hija y brindarle todo el amor y apoyo que necesitaba a partir de su diagnóstico, siendo un ejemplo en este Día de la Madre.