José Salazar/Mérida
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó del inicio de la canícula, periodo de 40 días en los que hay un calor extremo o intenso. Este fenómeno afecta a los seres humanos porque la humedad causada por las altas temperaturas propicia la creación de bacterias y virus en la atmósfera, lo que puede causar infecciones estomacales o en las vías respiratorias.

Ante esto, especialistas exhortan a mantenerse alerta por los síntomas de golpe de calor, que incluyen piel que se torna rojiza, sofocamiento, confusión y cansancio.

“El golpe de calor se produce cuando la temperatura del cuerpo se eleva por encima de los 39 grados centígrados. Cuando esto ocurre, el organismo es incapaz de regular su temperatura y puede presentarse deshidratación intensa, desmayos, convulsiones y hasta la muerte”, advirtió Jacinto Herrera León, especialista en Medicina Interna.

Dijo que los más afectados por el golpe de calor son los niños menores de cinco años, adultos mayores con enfermedades crónicas y quienes realicen actividad física en horarios de mayor intensidad solar.

“Expertos pronostican que será una canícula muy intensa, por lo tanto es necesario tomar previsiones para evitar sufrir los efectos esta calurosa temporada”, añadió.

Qué es la canícula

El especialista recordó que la canícula es una sequía que se caracteriza por la disminución de lluvias y el incremento de las temperaturas en diferentes regiones del país. En algunos casos, se alcanzarán temperaturas mayores a los 45 grados centígrados.

Este fenómeno comienza pocas semanas después del inicio del verano, con una duración de 40 días en promedio. Se contempla que este año concluya el próximo 20 de agosto.

Recomendaciones

El doctor Herrera León dijo que para mantenerse protegido, lo ideal durante la canícula es utilizar ropa fresca y de colores claros, mantenerse bajo la sombra, usar sombrilla, gorra o sombrero al caminar bajo los rayos del sol, evitar hacer ejercicio intenso después del medio día, beber abundantes líquidos sobretodo agua natural y utilizar protector solar.

Recalcó que se debe evitar realizar actividades en horas con alta incidencia de rayos solares que son entre las 12 y 16 horas.

“Además de estas recomendaciones, se debe procurar comer alimentos abundantes en líquidos, como la sandía, jícama, pepino, jitomate, fresa, melón, manzana, lechuga, apio y rábano, ya que estos tienen más del 90% de agua en su composición, son bajos en calorías y aportan fibra para mejorar la digestión”, finalizó.