El Ilustrador: Espeleobuzos y aluxes

Entre las figuras míticas de Yucatán destaca el Alux, ser mágico del campo yucateco que se relaciona con la protección de las selvas.

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Los aluxes pueden ser veleidosos, es decir, a veces pueden ser aliados del hombre y otras veces enemigos. (SIPSE)
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Sergio Grosjean/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Ya hemos comentado que acertadamente la actual administración retomó la tradición de realizar el Encuentro Internacional de Espeleobuceo, y que este, podría ayudar convertir al estado en la meca mundial del mundo subterráneo, y sospecho que la Seduma, en caso de recibir los recursos suficientes, también podría pensar en dar el banderazo de salida al encuentro internacional de espeleología, e incluso, tal vez unirlos.

Ojalá y Rolando sea un soñador o un estadista, y no un gobernante más del montón que deje seducirse por eventos que en ocasiones no valen mucho la pena -si afinamos la balanza- por no citar los fatuos, y le apueste a eventos y proyectos que pueden heredarnos un cimiento firme y retumben en el marco internacional, como podrían ser los citados, ya que además, estos poseen un agregado que se relacionan con el cuidado y protección del medio ambiente.

En el marco del evento, conversaba espeleobuzos que vinieron desde otras latitudes acerca de seres mitológicos que se relacionan con las cuevas y cenotes. Encabezando la lista mencionaba al emblemático por excelencia denominado la serpiente “tsukán”, que es la guardiana y dueña del lugar donde vive, y ya nuestro buen amigo el maestro Carlos Evia, que realizó una colosal investigación de este mito, nos ha demostrado que esta entelequia para algunos es innegable para otros. La lista es extensa, de tal forma, citaremos a uno veleidoso, es decir, a veces puede ser aliado del hombre y otras veces enemigo: el Alux

Con cierta similitud a los elfos; criaturas de la mitología nórdica y germana que fueron originalmente considerados una raza menor de dioses de la fertilidad, y han sido descritos como hombres jóvenes y mujeres de enorme belleza, inmortales, con poderes sobrenaturales, y que viven en bosques y cuevas.

Por su parte, los Chaneque eran considerados dioses en la Mitología Mexicana, y citados en la cultura azteca como “Ohuican Chaneque” se encuentran muy arraigados a la tradición oral aún en la actualidad, ya que comúnmente se dice que si las cosas desaparecen, fueron los chaneques quienes las escondieron, pues son los protectores de los bosques, y por consiguiente, con el derecho a realizar cualquier acción. 

Aterrizando en Yucatán, los aluxes poseen características de gran similitud en el sentido mágico e incluso físico a estos últimos, probablemente por encontrase ambos mitos en la región de mesoamérica. Según narra la tradición, los aluxes fueron concebidos bajo los sortilegios y ceremonias de los ah kin y de los chilames en 21 días con sus respectivas noches. 

Como se forma un alux

Para formar sus cuerpos, se recogía el barro en cuevas o cenotes vírgenes donde no hubiese llegado mujer alguna, y se ponía a serenar en nueve noches de luna llena y después se mojaba con brebajes de variada índole, aromatizados con flores silvestres para suavizarlo e ir formando con ese fresco barro, pequeños muñecos que cocinan con resinas, y ungen con copal y miel, para después depositarlos durante nueve noches con sus respectivos días en un altar que tuviese ofrenda de sacah, mismo que debe permanecer oscuro en su totalidad. 

Luego, y siendo la medianoche del ciclo lunar, se van a recoger los muñecos que son llevados con cantos y rezos a los montes para soltarlos, porque siendo hijos de los Balam, trabajan cuidando los montes, milpas y lugares donde se deposita la semilla sagrada, el ixi im o maíz. 

Cuando los campesinos tienen problema en su milpa derivado del robo de animales, o bien; los pájaros se acercan su plantío y se comen parte de la cosecha, le encargan al sacerdote maya o “h men” que fabrique unos aluxes para proteger sus tierras.Esta tradición, que viene desde tiempos inmemoriales, por fortuna todavía se conserva en Yucatán, preservando con ello un importante patrimonio cultural tangible e intangible.

Es así, que en ocasiones hemos presenciado como los campesinos solicitan protección, o simplemente piden permiso a los “señores” para entrar a una cueva o un cenote, les llevan alimento de diversa índole o licor, dulces, cigarros etc. De acuerdo a los mismos mayas, cuando estos se retiran los aluxes van por su comida, y de esa manera obtienen la petición que les hicieron. 

Mi correo es [email protected] y twitter @sergiogrosjean

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