MÉRIDA, Yucatán.- Aunque en algunos sectores home office es una modalidad generalizada, en Yucatán sólo ha sido adoptado por el 12 por ciento de las empresas, es decir, 15 mil 590 de las 130 mil 150 registradas en la entidad, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Como respuesta a la pandemia del coronavirus Covid-19, estas empresas implementaron el trabajo remoto. Sin embargo, de acuerdo con la segunda edición de la Encuesta sobre el Impacto Generado por Covid-19 en las Empresas (Ecovid-IE) del propio Inegi, el trabajo a distancia ha sido utilizado por 44.8 por ciento de las grandes organizaciones, que en Yucatán son 228.

En cuanto a las pequeñas y medianas empresas (Pymes), que en el Estado son 129 mil 922, el 19 por ciento ha implantado esta modalidad de trabajo, así como el 11 por ciento de los micronegocios.

Otras medidas que han adoptado para enfrentar la crisis son las ventas por internet, turnos de trabajo escalonados y la diversificación de la cadena de suministro.

Sin embargo, el home office es la estrategia donde hay una brecha más amplia entre las grandes empresas y las micro, pequeñas y medianas.

José Arturo Blancas Espejo, director general0 de Estadísticas Económicas del Inegi, señaló que el trabajo en casa es una medida que las empresas probablemente adopten de forma permanente.

De acuerdo con el Estudio sobre la Demografía de los Negocios 2020, en el último año se ha reducido 8 por ciento del total de unidades económicas en el país. El renglón de mayor impacto ha sido el de los establecimientos pequeños y medianos.

En tanto, en este mismo periodo se han creado 619 mil 443 nuevas empresas, lo que equivale a 12.75 por ciento de los negocios en México.

Cabe mencionar que el cierre de negocios y la reducción de personal en otros provocaron que 2.89 millones de personas perdieran su empleo. En Yucatán se perdieron más de 25 mil plazas de trabajo de acuerdo con el IMSS.

Aunque ya había una dinámica complicada para las empresas en cuanto a mantener su plantilla de personal, el aumento significativo en los cierres de negocios, especialmente pymes, coincide con la crisis sanitaria del COVID-19.