William Sierra/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yucatán.- Ayer por la tarde decenas de personas se dieron cita en Kanasín para dar el último adiós al Jesús Campos "El Teto", torero de profesión, quien se quitó la vida el pasado domingo.

Entre gritos de “torero” “torero”, en punto de las 16:30 horas partió a su última morada el novillero Jesús Campos "El Teto", y como si fuera una tarde de toros dio su último paseíllo para el eterno descanso de su cuerpo.

Estuvo acompañado de sus familiares y compañeros toreros, quienes llegaron en caravana hasta el cementerio de Kanasín, Yucatán con acordes de un pasodoble que se escuchaban por doquier, además de aplausos y la frase “Torero, Torero... Descansa en Paz”.

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Muerte del novillero

Agobiado porque tras una intervención quirúrgica en un tobillo los médicos le informaron que no volvería a torear, Claudio de Jesús Campos “El Teto” Morales, de 44 años de edad, se quitó la vida ahorcándose con un brazo de hamaca en su domicilio, en la colonia Xelpac de Kanasín.

La mañana del domingo pasado, un amigo del hoy occiso, de nombre Roberto (a) “El Chino” llegó de viaje a su domicilio en la calle 50 por 73 de la colonia Xelpac, pero al entrar halló a su compañero de casa Jesús Campos “El Teto”, ahorcado con un brazo de hamaca.

Repuesto del susto, Roberto –también de oficio novillero– bajó a su amigo y fue a avisar lo sucedido a los familiares del suicida, quienes viven cerca del lugar los hechos, ya que todos se dedican a la tauromaquia.

Los familiares avisaron de los hechos al número de emergencias 911 y en minutos llegó una ambulancia de la Policía Municipal de Kanasín, pero los paramédicos sólo pudieron confirmar que “El Teto” había muerto.

El occiso fue identificado por su hermano Edwin, quien declaró al Ministerio Público que toda su familia se dedica a la tauromaquia y que al tener su consanguíneo una lesión en un tobillo, y después una intervención quirúrgica, era imposible que volviera a hacerlo, propiciando la depresión de “El Teto”.

“El Teto” toreó en tres ocasiones en la Plaza Mérida, la más recordada fue la del 15 de diciembre de 1995, cuando se lidió un encierro de la divisa yucateca de Sinkeuel festejando su centenario, esa tarde alternó con Alberto Huerta y Alfredo Gutiérrez, cortando una merecida oreja al novillo de nombre Patroncito.

Personal del Ministerio Público y Servicios Periciales de la Fiscalía General del Estado, con base en Kanasín, se presentó a efectuar el levantamiento del cadáver y demás diligencias legales.

La autopsia realizada por el Servicio Médico Forense determinó que la causa de la muerte fue asfixia por suspensión.

Esta es cuando menos la muerte autoinfligida número 152 en lo que va de 2018 en Yucatán.