Guadalupe Adrián/Mérida
En el periodo oficial de la temporada de incendios, que concluyó el pasado 31 de mayo, la Coordinación Estatal de Protección Civil (Procivy) atendió dos mil 500 conatos de conflagraciones, que afectaron a cerca de mil 700 hectáreas, informó Jesús Enrique Alcocer Basto, titular de la dependencia.

“Por la línea de emergencia 911 esta dependencia estatal recibía al día aproximadamente cinco reportes”, aseguró.

Precisó que en este año aumentaron hasta 50 por ciento los puntos de calor (zonas de riesgo), en comparación con años anteriores, debido a la sequía, pero el personal para combatir los incendios llego más rápido al siniestro, lo que propició que la afectación fuera menor.

“Este año el número de incendios fue mayor pero el índice de afectación fue menor gracias a una reorganización que se hizo con todas las instancias que participan en el combate”, expuso.

“En esta temporada de sequía se registraron fuertes incendios, característicos de un año en el que persiste el fenómeno de El Niño, que en este momento está presente en el Pacifico”, indicó.

Resaltó que al ser una temporada de fuertes siniestros se activaron bases no solo en Mérida, sino también en Izamal, Valladolid, Tekax y Tizimín para llegar de manera más pronta al lugar.

“Durante estos tres meses son tantos los siniestros que se registran en la entidad, en comparación con los otros nueve meses del año, que se requiere de un mayor número de combatientes que estén bien preparados y equipados para hacerles frente”, manifestó.