MÉRIDA, Yucatán.- Después de que fueron notificados los encuestadores del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) que su contrato terminó el pasado viernes 3 de abril y no el 17 como se estipuló desde el principio, algunos temen que se les presente los síntomas del coronavirus, ya que su trabajo en campo seguía hasta el pasado viernes.

Ante esta situación los ahora ex empleados se sienten indefensos, ya que los síntomas del coronavirus se presentan mucho días después del contagio, por lo que no saben a quién recurrir.

En entrevista indicaron que el viernes pasado personal de la dependencia federal los citó para notificarles su término de contrato, situación que les sorprendió pues no era esa la fecha establecida.

“Este es un despido injustificado, ya que nuestro contrato termina el 17, pero la institución nos hizo firmar un documento donde se terminaba el convenio laboral el día 3, ya que el Inegi iba a cerrar sus puertas”, comentó Lucero Ku, una de las afectadas.

Aseguraron que la medida fue arbitraria porque quienes firmaron no recibieron ningún finiquito; además les avisaron que en la próxima quincena no recibirán pago alguno aunque hayan trabajado algunos días.

Además, la institución federal les indicó que ese papel que firmarían es su renuncia voluntaria y que si no lo hacían los documentos otorgados serían vetados para que no sean contratados en nuevos puestos laborales y su expediente se vería “manchado”.

Dijeron que sus derechos fueron violados porque a pesar de que el personal del Inegi dijo que les leyeron el documento a firmar con la presencia de testigos, pero en ningún momento permitieron el acceso a otras personas.

Además, les pidieron regresar al término del contrato 600 pesos que se les dieron como viáticos, porque también tuvieron que hacer trabajo de campo.