El inicio de la construcción del nuevo gasoducto de energía Mayakan es un proyecto de infraestructura crucial que promete transformar el suministro de gas natural en la Península de Yucatán, para lo que se invierte en un total de 2,000 millones de dólares, adelantó La Vicepresidenta de Estructura de Engie, Cecilie Previeu.

Destacó que Mayakan, no es sólo emblemático por su tamaño y su valiosa inversión, sino es un referente del desarrollo energético de México.

Añadió que este gasoducto es el más importante que se tiene en Engie a nivel mundial, mismo que permitirá la generación de una energía más competitiva segura y limpia.

“Reducirá la factura energética de millones de habitantes en la región y traerá nuevas inversiones a la Península de Yucatán”, indicó.

Durante el evento, Felisa Ros, directora general de Engie México, destacó la importancia de esta obra por su papel estratégico en la expansión del suministro energético de la región.

“Este proyecto no sólo abastecerá de gas a dos nuevas centrales de generación de energía eléctrica, Mérida IV y Valladolid I, que serán operadas por la Comisión Federal de Electricidad (CFE), sino que también marcará una nueva era en la infraestructura energética de la región”, comentó.

Estas centrales no sólo contribuirán a satisfacer la creciente demanda de electricidad en la Península, sino que también mejorarán la estabilidad y confiabilidad del suministro eléctrico.

La ampliación del gasoducto consiste en la construcción de un ducto paralelo al existente, con una extensión de 700 kilómetros desde Ciudad Pemex, en el Estado de Tabasco, hasta la ciudad de Valladolid, en Yucatán. Este nuevo ducto permitirá llevar gas a las plantas eléctricas Mérida IV y Valladolid I, utilizando prácticamente el mismo derecho de vía y duplicará la capacidad de transporte actual de 250 a 567 millones de pies cúbicos diarios de gas.

Esta ampliación, no sólo incrementará la capacidad de transporte, sino que también mejorará la eficiencia y seguridad del suministro de gas natural.

Felisa Ros subrayó que esta obra, además de fortalecer la capacidad energética de la Península, también contribuirá al desarrollo económico y a la creación de empleos en la región. “La ampliación del gasoducto Mayakan es un ejemplo claro de cómo las inversiones en infraestructura pueden tener un impacto positivo y duradero en nuestras comunidades”, concluyó Ros.

La construcción del gasoducto generará miles de empleos directos e indirectos, beneficiando a múltiples sectores económicos locales.

Además, el proyecto de gasoducto Mayakan es parte de una estrategia más amplia para diversificar las fuentes de energía y reducir la dependencia de combustibles fósiles más contaminantes. Al aumentar la disponibilidad de gas natural, se espera reducir las emisiones de carbono y promover el uso de energías más limpias en la generación de electricidad.

Con esta iniciativa, se espera que la Península de Yucatán se convierta en un polo de desarrollo energético, atrayendo nuevas inversiones y mejorando la calidad de vida de sus habitantes. Las comunidades locales también se beneficiarán de la mejora en la infraestructura y de los programas sociales que Enegie México ha implementado como parte de su compromiso con el desarrollo sostenible.

Al evento acudieron el secretario de Energía, Miguel Ángel Maciel Torres, el director de la CFE, Manuel Bartlett Díaz, gobernadora de Campeche, Layda Sansores, y Ernesto Herrera Novelo, secretario de Fomento Económico, en representación del gobernador de Yucatán, Mauricio Vila Dosal.