Juan Manuel González: Lecciones… Gran Torino
Juan Manuel González: Lecciones… Gran Torino
El fin tuve la oportunidad de ver la película “Gran Torino” actuada y dirigida por la leyenda Clint Eatswood, e independientemente del final, me dejó una gran sensación y muchos mensajes que descaradamente nos detalla la cinta y que nos hacen reflexionar (por lo menos a mí), sobre la importancia de los momentos en la vida y las personas que nos rodean, incluyendo nuestros familiares. Si bien el filme tiene momentos y comentarios divertidos, en términos generales es una película que tiene mucha crudeza, pero a su vez, es lo que hace que deje muy claros los mensajes que, a lo largo del trámite de la misma, queden extremadamente claros y directos. Al final, tú decidirás qué mensaje es el que más te cautivó.
Aquí te menciono 5 lecciones que nos deja la película de “Gran Torino”:
- La importancia de la relación entre padres e hijos: Si bien es cierto que el tiempo pasa, debemos recordar quién nos dio la vida y porqué estamos hoy en este mundo. Así es que como mínimo agradecimiento debemos de estar pendientes de nuestros padres. Y los padres debemos recordar que los hijos tienen su vida propia y seguir adelante. No dejemos para otro día el poder estar con ellos y quererlos y respetarlos al infinito. Demostrándolo con palabras y acciones.
- A veces las personas de las que menos esperamos, son de las que más recibimos: Desgastamos mucho tiempo de nuestras vidas quejándonos de los vecinos, el sistema, los políticos y miles de cosas más, y la vida se nos pasa de frente sin darnos cuenta. Por lo que sería más provechoso que vayas disfrutando lo que tienes y luchar por lo que anhelas. Nunca debemos menos preciar a nadie y debemos tratar bien a las personas, nunca sabes quién podrá ayudarte.
- Todos tenemos una parte buena: La mayoría de las personas cuentan con un lado bueno. Sin importar cómo sea percibida esa persona, el corazón tiene un lado blando que debemos cuidar. Sin embargo, muchas personas lo tienen guardado más por protección que por cualquier otra cosa.
- Para lograr objetivos, hay que sacrificar algo: Queda claro que es muy complicado lograr las metas trazadas o cumplir los sueños, si no se sacrificó algo en la vida, puede ser tiempo, dinero, esfuerzo… pero algo tuviste que dar para lograrlo.
- No se trata de venganza, sino de inteligencia: Las personas que no pueden controlarse a sí mismas, no lograrán controlar nada, más que a la fuerza. Aplica la regla de las 72 horas para dejar pasar las cosas y piensa en frío.