Lucifer: una comedia infernal

Columna de Rodrigo Ordóñez Sosa: Lucifer: una comedia infernal

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En el universo de “Sandman o el señor de los sueños”, comic escrito por Neil Gaiman, existe un volumen dedicado a Lucifer, como guardián del Infierno, el papel que tiene como un elemento que mantiene cierto orden dentro del universo, tanto de los sueños como de los humanos, evitando que demonios y almas escapen a sembrar el caos en nuestra realidad.

En esa historia, existe un arco dedicado a un momento de claridad que tiene Lucifer sobre su papel como guardián, decidiendo que no quiere participar más en los juegos de su padre, optando entonces por cerrar las puertas del Infierno, expulsar a sus habitantes fuera de ahí y clausurar de forma definitiva el lugar, con la intención de destruir los planes de Dios. Por la predominancia y el carisma que le imprimieron a este personaje, los editores decidieron explorar más el mundo de Lucifer, contando su paso por la tierra a raíz de su autoexilio del Infierno.

Bajo la premisa el Príncipe de la Oscuridad ha desaparecido, se inicia el primer tomo de esta aventura titulada “Pecados por Comida” que nos explica qué pasó con este ángel caído.

Así, encontramos a un Lucifer ciego, tullido y derrotado, el antiguo soberano del Infierno ahora es un anciano marchito y desaliñado, atrapado en un pueblecito controlado por un ser superior a él, unos espectros gobernados por una fuerza siniestra no dejan de atormentarlo, despedazarlo y evitan que recupere su memoria, con lo cual latrama gira en la búsqueda de la respuesta ¿cómo llegó ahí?, ¿por qué no puede escapar?, además se rompió el lazo con su hijo Calibán, la única entidad capaz de evitar el fin del mundo.

Paralelamente, un agente de la policía de Los Ángeles, la ciudad adoptiva de Lucifer, va perdiendo no sólo a sus seres queridos, sino todas las facultades mentales, orillándolo paulatinamente a la locura. Desesperado por encontrar el motivo de su sufrimiento, el detective John Decker se ve arrastrado a una conspiración sombría, cuyos miembros comparten un único objetivo común: matar a Lucifer. Pero existe otra pesadilla oculta dentro de un cofre negro que cambiará la historia de todos los protagonistas de esta aventura.

Una de las aportaciones importantes de esta saga es precisamente que la serie de televisión retoma varias ideas de este comic, aunque son diametralmente opuestas, tanto en formato como en narrativa, ya que en la serie la asemejaron más al formato policial usando la mitología cristiana sólo para introducir al antagonista en turno.

Este comic, publicado hace unos años, presenta una narrativa más espesa sobre el conflicto que tiene Lucifer al momento de tratar de descubrir su lugar en el mundo, ahora que abandonó el infierno. Esta es una historia que redefine el mito cristiano del diablo, quitándole esa faceta acartonada y analiza nuestros vanos intentos de justificar las atrocidades que cometemos contra otros seres vivos, con la excusa: el diablo me obligó a hacerlo.

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