WilliamSierra/Mérida
Yoanner Negrín realizó un trabajo extraordinario, mantuvo empapada la pólvora de la recia artillería de Rieleros, sujetándolo en cinco imparables en siete entradas completas, y teniendo el respaldo de sendos bambinazos de Luis Felipe Juárez y Leo Heras, Leones de Yucatán triunfo 4-2 para apuntarse en Aguascalientes su segunda seria consecutiva, en esta segunda mitad.

El cubano hizo lo que nadie había podido en esta serie: detener el ataque hidrocálido, que en los dos primeros juegos sumaron 33 imparables, obteniendo su séptima victoria por tres tropiezos y mejoró su efectividad a 2.62 que lo mantiene como segundo mejor lanzador del circuito, detrás de su compañero César Valdez.

Ronald Belisario se encargó de la octava y Andrés Ávila recibió la encomienda de preservar el éxito, siendo su primer salvamento.

Este último de la serie fue un encuentro muy diferente a los dos primeros. Esta vez se impuso su majestad el pitcheo, y es que tanto Negrín como el venezolano Néstor Molina sostuvieron un interesante duelo de serpentinas.

Molina únicamente permitió cuatro inatrapables, aunque para su mala fortuna los dos primeros que le pegaron, en la segunda entrada fueron sendos cuadrangulares, espalda con espalda de Luis Felipe Juárez y Leo Heras.

Un tercer imparable permitido por el derrotado Molina también le hizo daño, cuando el italiano Alex Liddi disparó jit para remolcar a Sebastián Valle, en la tercera entrada, y el cuarto registro que le anotaron llegó hasta la sexta, sin que las fieras batearan de jit.

Y es que Héctor “La Vieja” Hernández gorreó la inicial, avanzó con golpe a Liddi, Juárez fue dominado con elevado al cuadro, llegó a la antesala con rola al pitcher de Heras y alcanzó el pentágono con un yerro del yucateco Julián Castro a batazo del estadounidense Xavier Scruggs, que sigue dando tumbos a la ofensiva. Se fue de 3-0 anoche con lo que apenas suma dos jits en 23 turnos y ha sorbido nueve chocolates.

Negrín tuvo un comienzo un poco incierto. Después de anestesiar al colombiano Tito Polo le ligaron par de imparables y tras dominar al cuarto leño Saúl Soto, Marc Flores metió una línea de jit para remolcar a los corredores.

El cubano engomó a Eliecer Ortiz para acabar la entrada y de ahí estuvo intransitable. Logró retirar en orden el segundo, tercera y cuarto episodios sin que ningún rielero le llegará a sacar la pelota del cuadro.

Fue hasta el quinto episodio, tras dos fuera, en que un bateador logró pisarle a Negrín la inicial y fue por la vía de la transferencia, siendo la primera que firmaba. Con el segundo ponche a Polo colgó la argolla.

La única otra vez que dos rieleros le pisaron las colchonetas a Negrín fue en la sexta, ambos por sendos pasaportes, pero se creció al castigo y sacó los tres auts por la vía del ponche. En total el estelar antillano engomó a 10.