Iván Duarte/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- Los criadores de gallos para pelea en la entidad recurrieron a la agrupación nacional para ampararse en defensa de esta actividad.

Ayer Efraín Rábago Echegoyen llegó desde el Distrito Federal como representante de la asociación para solicitar audiencia con el regidor José Elías Lixa Abimerhi, quien pretende que se regule el maltrato animal al prohibir diversas actividades, entre ellas las peleas de gallos.

Los representantes de cerca de 500 criadores de gallos de Mérida, integrantes de seis clubes con presencia sólo en la capital, trajeron a Efraín Rábago Echegoyen, presidente de la Sección Nacional de Criadores de Aves de Combate y de la Comisión Mexicana de Promoción Gallística, para entablar un diálogo con el regidor de extracción panista, para solicitar que no se prohíba esta actividad.

"El resultado inmediato a la entrada en vigor de este reglamento sobre la ley de control y cuidado animal en la entidad significaría la pérdida de empleo o de ingresos para miles de familias en la entidad", dijo.

Sólo en la Península la agrupación cuenta con más de 100 clubes afiliados, y sólo en la capital yucateca hay más de 500 criadores en seis diferentes clubes.

Apostados a las puertas de Palacio de Gobierno, los representantes de los criadores de aves de combate esperaron a una delegación encabezada por Rábago Echegoyen y que se entrevistó con Lixa Abimerhi.

No obstante la reunión que empezó al mediodía no resultó con la respuesta esperada por los criadores, quienes estimaban un cambio en la postura del regidor a favor de esta medida, y será hasta dentro de dos semanas cuando la propuesta se traslade al cabildo para su aprobación o rechazo cuando los afectados acudan de nuevo a solicitar no entre en vigor el reglamento prohibitorio de la actividad.

Rábago Echegoyen aseguró que la actividad de pelea de gallos es heredada desde la fundación de México por los españoles, y que el promedio de actividades de estas peleas en la entidad y sus 106 municipios es de ocho peleas por semana.

"La actividad queremos aclarar que se realiza con la autorización de la Secretaría de Gobernación y de los respectivos alcaldes de los municipios, cuando hay de por medio una apuesta económica, pero si no hay apuesta, la actividad se realiza sin necesidad del permiso, porque la Constitución Mexicana no la prohíbe", dijo el entrevistado.