Mente abierta... y boca cerrada
El Poder de la Pluma.
Siempre serán tiempos de cambio, y las personas que se queden estancadas sin evolucionar serán las que no avancen en los aspectos de sociedad y mejoras a la comunidad porque el cambio les causa conflicto. Tenemos que tener la mente abierta y trabajar en las transformaciones para poder lograr revolucionar los procesos a mayor velocidad que el promedio de la gente de la calle. Y sin poner a un lado, por otra parte, mantenerse callados sin dejar de realizar las acciones necesarias para lograr dicho cambio de hábitos, estrategias, tácticas y en general cualquier evento o acción que nos lleve a lograr nuestros objetivos de vida.
Aquí te menciono cinco diferencias entre una mente abierta y una mente cerrada:
1.- La aceptación.- Primero acepto que hay gente que piensa y actúa diferente a mí y luego respeto las opiniones diversas de las personas cuando tengo la mente abierta. Los de mente cerrada están más preocupados que ocupados en lo que van a decir los demás de ellos mismos que en el contenido de la opinión en sí.
2.- El aprendizaje.- Los de mente abierta tomarán todo lo que les suceda como una experiencia de vida, buena o mala, pero siempre extraerán lo mejor de ella para aprender. Los de mente cerrada no pararán de lamentarse por todo lo malo que les suceda y se vivirán quejando y tirándole las culpas a alguien diferente a ellos mismos.
3.- El equilibrio.- Una mente abierta siempre será más equilibrada ante cualquier circunstancia que la mente cerrada. El manejo de sentimientos es mejor y más controlado en las mentes abiertas. En la mente cerrada, un simple enojo pudiera llegar a resultados fatales por no poder controlarlo.
4.- La actitud.- El positivismo es parte de la mente abierta, porque aunque las cosas no hayan salido como uno pretendía, le dará el beneficio de la duda al otro como un camino para resolver situaciones o cumplir metas. La mente cerrada solo se quejará y dirá que todo es difícil y que nada puede resolverse de manera inmediata y sencilla.
5.- Las metas.- Una mente abierta trabaja para cumplir objetivos y metas de manera clara y transparente. La podrá frenar un rato algún obstáculo en el camino, pero siempre irá hacia adelante. La mente cerrada se mete en su burbuja cuando se atora en algo, y lo único que logra es un estancamiento total y no avanzar.
Recuerda que el principal freno del cambio es el miedo. Nuestras creencias son solo eso, creencias. Tenemos que vivir nuestra realidad mucho más apegada a la verdad.