Novedades Yucatán/Mérida
Una mujer de 67 años pide justicia para no ser desalojada presuntamente de manera ilegal del predio en donde ha vivido por más de 45 años, en la colonia México al norte de Mérida.

La señora Bertha M. S. acusa a su hermana Rosalinda M. S. de tráfico de influencias y de una serie de irregularidades en torno a la posesión del predio de sus difuntos padres, ubicado en la calle 29 entre 10 y 12 de la mencionada colonia.

Según las declaraciones de la afectada, quien es viuda y maestra pensionada, ella vivió y atendió a sus señores padres durante gran parte de su vida, por lo que antes de fallecer su papá, Facundo M. A., le dejó en testamento la propiedad, sin embargo al paso de los años, su hermana Rosalinda “obligó” a su madre de 90 años a donársela.

Bertha asegura que cuidó a su mamá Lilia S., diagnosticada con Alzheimer, desde el año 2000, a quien tuvo que internar en alguna ocasión al hospital Psiquiatrico de Mérida debido a su enfermedad.

En octubre de 2013, su hermana Rosalinda se llevó a su madre y nunca jamás la regresó a su casa de la colonia México.

Supuestamente, aprovechando el estado de salud y la edad de la señora Lilia S. fue llevada con un notario en donde realizó una supuesta donación falsa del predio en beneficio de Rosalinda con huella digital, ya que la viejita ni siquiera podría firmar.

Bertha M. S. aseguró que a los seis meses su madre falleció y su cadáver fue incinerado presuntamente para ocultar la evidencia de una posible autopsia y confirmar el avanzado estado de Alzheimer que tenía.

Días más tarde, Rosalinda inició un juicio ordinario plenario de propiedad y posesión del domicilio, antes mencionado, con una supuesta escritura apócrifa.

Con dicho documento consiguió una sentencia a su favor y le conceden el uso de la fuerza pública para desalojar a su hermana Bertha.

Por su parte, la afectada realizó el pasado viernes una protesta en la FGE para impedir que se ejecute la orden de desalojo y denunció ante el Fiscal las probables irregularidades del caso, además de amenazas de muerte, así como los intentos de agresión física, por parte de su hermana y su familia.

Aseguró que la agresión más fuerte que recibió fue por parte de unos sujetos que entraron a su casa y la navajearon cuando se encontraba recién operada, así como otro tipo de atentados como un choque.

Igualmente, vecinos y amigos se han inconformado ante el probable desalojo con la Fuerza Pública de Bertha.

Aquí mas detalles del caso explicado por la afectada.