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MÉXICO, D.F.- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) informó que la madrugada de este martes murió el oso negro “Invictus”, a causa de una afección cardiaca.

El plantígrado se convirtió en símbolo de la defensa de los animales en cautivero tras ser rescatado de un circo en Yucatán, donde le extirparon la mandíbula para que no atacara a su entrenador.

De acuerdo con un comunicado de la Profepa, el corazón del úrsido- del cual no se pudo determinar su edad exacta- no resistió pese a los esfuerzos de los veterinarios y del personal capacitado que lo atendía en el área de cuidados del Bioparque Convivencia Pachuca.  

"Invictus" sufrió un paro cardiorrespiratorio, luego de recuperarse de varias cirugías para insertarle una manbídula artifical

Fue rescatado después de ser víctima de maltrato extremo en el espectáculo ambulante “Harley Circus”, en marzo pasado en Yucatán, cuando la Profepa aseguró al ejemplar de oso negro (Ursus americanus), así como a dos felinos (un tigre de bengala y un león africano) y tres ejemplares de mono araña.

El oso fue encontrado sin maxilar inferior, el cual le fue extirpado por sus propietarios, lo cual le impedía ingerir alimento sólido y beber agua.

La Profepa sancionó al responsable del espectáculo con una multa de más de 700 mil pesos. También se le revocó la autorización como Unidad de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA) y se interpuso denuncia penal.

Tras el aseguramiento, "Invictus" vivió bajo los cuidados y el tratamiento de especialistas en la Unidad de Rescate, Rehabilitación y Reubicación de Vida Silvestre  Bioparque Convivencia Pachuca, en el estado de Hidalgo.

El pasado 19 de julio, un equipo de profesionistas y expertos intervino quirúrgicamente al animal con el fin reconstruirle la mandíbula inferior colocando dos barras de titanio. La cirugía fue exitosa. Incluso, 48 horas después de la intervención ya era capaz de gruñir, masticar alimento y beber agua.

Durante su estancia en Bioparque, fue sometido a tres cirugías mayores para reconstruirle la mandíbula. Participaron más de 30 especialistas, entre ellos, tres maxilofaciales voluntarios. Tan sólo en una de las intervenciones quirúrgicas se utilizaron 78 injertos para cubrir el maxilar inferior.

El oso fue bautizado con el nombre de "Invictus" en alusión al poema del escritor William Ernest Henley.