La historia de la parroquia de Mama en Yucatán

El municipio de Mama tiene en su iglesia principal un legado histórico, que según especialistas abarca cuatro siglos, pues se presume que este templo católico fue construido a finales del siglo XVII.

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La parroquia es de un solo cuerpo, sólida construcción de mampostería cubierta con techo estilo bóveda de cañón. (Foto: Milenio Novedades)
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Ana Fernández/Milenio Novedades                                                                                          MÉRIDA, YUC.-El municipio de Mama tiene en su iglesia principal un legado histórico, que según especialistas abarca cuatro siglos, pues se presume que este templo católico fue construido a finales del siglo XVII y cuya patrona es Nuestra Señora de la Asunción.

Como muchas iglesias se piensa que fue edificada donde existió una capilla abierta, aprovechando que, según las referencias históricas, en 1612 existía ahí un convento que cinco años después obtuvo el título de vicaría.

Las referencias históricas indican que el 25 de abril de 1617, el convento de Mama recibió el título de vicaría y se considera que la iglesia actual comenzó a construirse a finales del siglo XVII, fecha en que se instaló un presbiterio en lo que fue la capilla abierta.

Hace unos 80 años cuando se hizo un levantamiento de ese inmueble se supo que el lugar era pequeño, pero se construyó en un espacio que poco a poco se fue ampliando, aunque décadas después los cambios de gobierno le fueron quitando terrenos para uso público.

La parroquia es de un solo cuerpo, sólida construcción de mampostería cubierta con techo estilo bóveda de cañón; destaca en su fachada principal una espadaña con tres campanas, una de las cuales se rompió por el impacto de un rayo y en una de ellas es posible leer una inscripción que data de 1719.

De sus gruesos muros se sacaron cinco capillas de cada lado, la mayoría de ellas tiene altares construidos de mampostería con pequeños retablos de madera.


Aunque da la apariencia de ser un inmueble pequeño, en realidad la iglesia de Mama se aprecia mejor su verdadera dimensión desde dentro, ya que es amplia y desde fuera se observan sus detalles, como la fachada, la comodidad de las bancas de cemento que tienen en la puerta principal y sus campanas.

Para poder comprender mejor la historia del lugar vale la pena hacer un recorrido por la zona, ya que en la parte posterior aún funcionan dos accesos, cuyas paredes permiten ver el trabajo de construcción de lo que primero fue el convento, al rodearla es posible observar un recinto aún más viejo que tiene un techo abovedado con una cruz de mampostería en su parte superior.

Conocer los detalles de esta iglesia es un paseo que vale la pena y un punto a destacar es que el material y la pintura no combinan con la antigua estructura, pues incluso tienen rampas de metal que facilitan el acceso a interior a las personas con discapacidad en sillas de ruedas.

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