MÉRIDA, Yuc.- Tanto ladraba su perro, que una vecina del fraccionamiento La Herradura en Ciudad Caucel se asomó a su patio a ver qué ocurría.

Vaya sorpresa que se llevó tras observar lo que en principio creyó que era un tolok, para luego confirmar que en realidad era un pequeño cocodrilo.

Nadie sabe cómo es que esta especie llegó hasta ese predio de la calle 69 en La Herradura, pero lo mejor que hizo la dueña del predio fue llamar a las autoridades para que se hicieran cargo del inusual visitante.

Según relató, esta mañana escuchó a su perro ladrar demasiado y ante tanta insistencia decidió asomarse al patio a ver qué aturdía a su mascota, observando de pronto algo que parecía una iguana de al menos 50 centímetros, pero al acercarse un poco más confirmó que no era iguana, sino un cocodrilo pequeño, por lo que de inmediato cargó con su perro y se metió de nuevo a la casa.

Llamó entonces a las autoridades, llegando bomberos y policías que se hicieron cargo del reptil, mismo que sería enviado a las autoridades ambientales para decidir su destino. Lo que nadie se explica es cómo fue que el animal llegó a ese patio.