MÉRIDA, Yuc.- La doctora adscrita al laboratorio de virología del Centro de Investigaciones Regionales “Doctor Hideyo Nouguchi”, Guadalupe Ayora Talavera, con amplia experiencia en virus respiratorios, explicó cómo surgieron los casos de coronavirus en Wuhan, China y llamó a estar tranquilos pues esta infección no representa una amenaza letal.

En rueda de prensa, la especialista detalló que por medio de trabajos científicos, lo que se sabe hasta el momento es que este agente infeccioso tuvo su origen en un cruce entre serpientes y murciélagos.

Señaló que esa versión no ha sido certificada, pero se señala fuertemente que el origen viene de las serpientes que estaban en un mercado de Wuhan, donde se venden este tipo de especies y la interacción que hay entre estos animales pudo haber generado el virus, y que de la serpiente haya pasado al humano.

La familia de los coronavirus se encuentra muy extendida en el reino animal, y es una de las causas más frecuentes de resfriado en humanos.

Subrayó que estos coronavirus no son nuevos y los primeros reportes que hubo de estos virus fue la epidemia del Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS) que surgió en China en 2003 y posteriormente, la del Síndrome Respiratorio de Oriente Medio (MERS), que se reportó por primera vez en Arabia Saudita en el 2012.

En el caso del coronavirus SARS, Ayora Talavera señaló que hubo aproximadamente 8 mil casos y 800 muertes a nivel mundial, y esta enfermedad también provino de animales de mercado, transmitiéndose en este caso de la civeta, un mamífero parecido al gato, mientras el MERS se transmitió de los camellos al humano.     

Infección moderada 

Los coronavirus, detalló, no suelen generar infecciones respiratorias severas a excepción del SARS y el MERS e incluso este nuevo coronavirus sólo causa una infección moderada.

Aseveró que los casos graves de coronavirus se dan porque la gente tiene enfermedades concomitantes que hacen que este mal se vuelva más severo, como por ejemplo diabetes, insuficiencia renal u otros, lo que genera neumonía al paciente por falta de anticuerpos y posteriormente la persona puede fallecer.

“La tasa de letalidad del nuevo coronavirus es muy baja, de aproximadamente el uno por ciento y en la mayoría de los casos la gente se ha recuperado, aunque hasta el momento no hay tratamiento específico”, puntualizó.

El tratamiento que se otorga en estos casos es interferón y la rivabirina, y todavía no hay vacunas.

Indicó que el laboratorio nacional del Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (Indre) en la Ciudad de México ya trabaja en las pruebas diagnósticas para este virus y el caso sospechoso del maestro del IPN que parecía estaba infectado tras un viaje a China, se confirmó como un caso negativo.