La Notaría Pública No. 25 de Yucatán logró obtener la certificación de calidad de sus procesos ISO 9001:2015, un distintivo que abarca integralmente sus servicios jurídicos notariales y corporativos, con el sello de calidad y aborda todos sus procesos notariales, desde la recepción del cliente hasta la inscripción de las escrituras en los Registros Públicos correspondientes.

Esta certificación se destaca por su reconocimiento dual, otorgado por un organismo acreditado por la Entidad Mexicana de Acreditación (EMA) y el prestigioso IQNET, la red líder global en certificaciones de sistemas de gestión, responsable del 25 por ciento de los certificados emitidos, destacando especialmente en calidad.

El titular de la Notaría 25, Bernardo Rivadeneyra Pérez, destacó que cumplir con los requisitos para lograr esta certificación implica una sólida base de implantación y estandarización de procesos, así como una estructura y cultura organizacional sólidas.
La Notaría No. 25 no sólo ha superado estos estándares, sino que ha demostrado una inserción efectiva de herramientas de mejora en todos los niveles y áreas de la empresa y, con ello, se convierte en la primera notaría en obtener esa certificación.

Este distintivo refleja el compromiso continuo de la Notaría 25 con la excelencia y la mejora continua, asegurando a sus clientes la más alta calidad en servicios notariales y corporativos. La certificación ISO 9001:2015 no sólo valida sus prácticas de gestión, sino que reafirma su posición como referente en el ámbito notarial y corporativo en la entidad.
Desde las modernas instalaciones del Rodium Business Center en la colonia México y ante Yusiff Heredia Fritz, Consejero Jurídico del Gobierno de Yucatán, y Enrique Irabién Arcovedo, presidente del Colegio Notarial de Yucatán, el notario Rivadeneyra, entre otras personalidades, destacó los compromisos de confidencialidad y eficiencia de los procesos de gestión notarial que siempre han caracterizado a esa firma jurídica.

En el marco de nuestro compromiso constante con la integridad, la confidencialidad y la eficiencia en la gestión de los procesos notariales, nos complace informarles sobre los avances significativos realizados en nuestro sistema de gestión y protección de datos personales e información de negocios, destacó.

Indicó que la información manejada en las notarías abarca aspectos sumamente sensibles, como testamentos, créditos, asociaciones estratégicas empresariales y negocios, por lo que resaltó que “la confidencialidad siempre ha sido nuestra prioridad, y continuamos privilegiándola en todas nuestras operaciones”.

Para fortalecer aún más nuestros protocolos de seguridad, abundó, se realizaron considerables inversiones en tecnología que permiten optimizar los recursos y garantizar la protección de la información.

Estos procesos no sólo resguardan la confidencialidad, sino que también nos permiten visualizar tanto los riesgos internos como los externos, así como identificar oportunidades para adaptarnos a los constantes cambios del entorno.

“En nuestro compromiso continuo con la mejora, hemos implementado diversas acciones, tanto generales como específicas. Entre ellas se incluye la medición de tiempos de entrega, el desarrollo de softwares especializados para el seguimiento de procesos, y la documentación detallada de procedimientos y metodologías de trabajo. Estos esfuerzos nos han permitido identificar y medir el desempeño de nuestros proveedores, asegurando el cumplimiento de sus tiempos de respuesta”, destacó.

Identificación de conflictos de interés 

Ante líderes de cámaras y organismos empresariales como Levy Abraham Macari, de Canacome; Raúl Asís Monforte González, de la CMIC; y Enrique Trava Grifin de AMPI, el notario Bernardo Rivadeneyra destacó que otro de los aspectos a resaltar es la identificación proactiva de conflictos de interés.

“Un valor adicional y de suma importancia para nosotros es la identificación proactiva de conflictos de interés en la gestión de los procesos, con una atención institucional enfocada en resolverlos de manera ética. Nuestros procesos de auditoría interna están diseñados para asegurar el cumplimiento de sistemas y conductas alineadas siempre con nuestro código de ética e integridad”.

Reconocemos que, aunque nos esforzamos por la excelencia, no estamos exentos del error humano o de la eventualidad de la infidelidad. Sin embargo, contamos con la voluntad y las herramientas necesarias para corregir cualquier desviación y mantener los estándares de calidad, puntualizó.