Vivir bien… no sobrevivir
Juan M. González: Vivir bien… no sobrevivir
En el fondo de nuestros anhelos siempre buscamos la felicidad, la paz y la tranquilidad entre otras cosas. Pero si queremos conseguir alguna de ellas definitivamente deberíamos empezar por tener una calidad de vida elevada para poder alcanzar esos objetivos durante el camino. Y aunque no soy fan de la palabra calidad porque se me hace muy general, y además, para cada quien significa algo diferente, mejor trato de detallarla lo más posible. Si yo te preguntara qué es calidad para ti, me responderías algo muy diferente a lo que es para mí. Si te pregunto si una pluma es de calidad para ti, qué significa, me podrías responder: resistencia, durabilidad, nivel de tinta, etc.
Por esa razón hoy te defino 5 consejos para mejorar tu calidad de vida:
- Analízate constantemente: Cada determinado tiempo, según tú quieras y puedas, dedícate a analizar tus acciones, tus sentimientos, tus amigos, tu familia y todo lo que te rodea. Realiza una evaluación de tu comportamiento en todos estos entornos para poder mejorar en los puntos que sientas que te están frenando y así sanar las zonas que te perjudican e impiden tus logros.
- Desecha lo que no te aporta nada: Después de ese esplendo análisis, sabrás qué es lo que te estorba para tener esa calidad de vida que deseas. No importa si son acciones, momentos, eventos o personas, hazlos a un lado para poder crecer y no sigas invirtiendo tiempo y energía en eso que no le suma absolutamente nada a tu vida.
- Tener o hacerte tiempo para lo que te llena: Las cosas que nos alimentan el alma y el espíritu deben ser las cosas que hagamos constantemente y durante más tiempo. Esas cosas, cualquier tipo de actividad que sea, tu trabajo, deporte, artes, cuestiones culturales, en fin, cualquier tipo de actividad que te haga sentir pleno, merece que le dediques ese tiempo. ¡Organízate ya!
- Nunca dejes el aprendizaje-enseñanza: Un complemento muy pleno del punto anterior es el nunca dejar de aprender cosas nuevas y también el poder transmitir nuestros conocimientos y experiencias a otras personas. El compartir tanto en el aprendizaje como en la enseñanza habla de nuestra sencillez y nuestras ganas de crecimiento personal.
- Recárgate de energía: Como en todo, localiza dónde se encuentran tus puntos o lugares físicos, donde puedas y te sientas recargado de energía. En ocasiones son lugares específicos en el mundo, a veces son momentos o actividades específicas. Todos lo necesitamos de vez en cuando.