VALLADOLID, Yucatán.- Los dueños de los comercios establecidos en el municipio de Valladolid están a la espera de la resolución de sus quejas por el cobro excesivos de sus recibos de luz, ya que como ocurrió en Mérida, las cantidades eran elevadas cuando muchos lugares estaban cerrados desde marzo; aunado a ello el cobro por el agua también aumento por lo que entablaran mesas de diálogos con el Ayuntamiento, informó, Wilberth Ortegón López, presidente de la Canaco delegación Valladolid.

Dijo que han tenido buena comunicación con la Cámara Nacional de Comercio de Mérida, que preside Michel Salum Francis, por lo que se les pidió que mandar un documento junto con la copia de su recibo a un correo electrónico, con una explicación detallada de por qué cree que es no se debió de cobrar la cantidad elevada para darle seguimiento y ajustar esas tarifas.

“Como en Mérida hemos tenido casos elevados exageradamente en el recibió de la luz eléctrica, un caso claro fue de un hotel que está cerrado desde el primero de abril y llegó su recibo de 17 mil pesos, por lo que son esos casos que estamos a la espera de que se resuelvan porque consideramos que es una situación injusta”, explicó.

Dijo que la situación es complicada para los dueños de los negocios debido a que no cuentan con los recursos para pagar esa cantidad ya que la mayoría cerró.

De igual manera, hubo inconformidad por la llegada del recibo del agua, ya que si bien, el Gobierno del Estado decretó que absorbería el pago de este servicio durante los meses de abril y mayo, para los comercios no tuvieron la ayuda, por lo que este mes aumentó hasta un 30 por ciento el pago.

“Nosotros hemos visto que de nada sirvió que el Ayuntamiento haya anunciado la reducción del pago del agua en un 30 por ciento, porque ocurrió como hacen algunos comercios, aumenta el porcentaje y te lo quitan al final el pago es el mismo y no percibimos ninguna ayuda”, explicó.

Dijo que les urge el regreso a las actividades sobre todo por los empleados de los comercios ya que muchas de esa gente proviene de las comisarías y por la presencia del Covid-19 no los han dejado entrar para trabajar por lo que también ellos están desesperados.