Los integrantes de los grupos apostólicos de las iglesias de Baca y Acanceh realizan ensayos para la representación de los Viacrucis en sus respectivos municipios. Estas representaciones de la Pasión de Cristo son dos de las más tradicionales de Yucatán y participan un gran número de personas en el proceso.

En la Villa de Baca será la edición 46; según sus organizadores, es la más antigua de Yucatán.

La de Acanceh será la 44 edición ininterrumpida del Viacrucis más grande y con mayor tradición en el Estado, el cual se empieza a preparar apenas termina el de la edición anterior.

Participan un importante número de habitantes de estos municipios, tienen que ver la logística, el derrotero, el vestuario, las personas que van a representar cada uno de los papeles para que se preparan física y psicológicamente.

Además, deben ver los requerimientos para poder obtener los recursos monetarios para que todo salga bien, ya que personas de diferentes puntos del Estado acuden a estas representaciones que se hacen en la entidad.

Gaspar Alejandro Canché Solís, de 21 años, quien actualmente es estudiante de la carrera de Ingeniería Electrónica en el Tecnológico de Motul, dará vida a Jesús en esta Semana Santa en Baca.

El joven, quien además de estudiar es dueño de una barbería, señala que años atrás estuvo participando en diferentes papeles en las representaciones, la más reciente fue la del año pasado donde participó como Simón de Cirene y ahora por una promesa realizará el papel principal de Jesús.

El grupo invita a la población en general para que apoyen, se estarán realizando ventas para recaudar fondos para la realización de esta actividad y de igual manera para que más gente se una al equipo porque en la semana mayor se necesita de mucha ayuda.

Por su parte, Andrés Medina se retiró del papel de Jesús de Nazaret en el Viacrucis viviente de Acanceh tras ocho años de interpretarlo, por lo que están designando papeles.

Este año, en lugar de participar en el papel principal, se involucró en la organización del Viacrucis, brindando su experiencia y conocimientos para garantizar la calidad de este evento católico nombrado el más importante de Yucatán.

Comentó que este Viacrucis de Acanceh se mantiene vivo a pesar de los cambios sociales. Las personas del pueblo y de otros puntos de Yucatán, así como de otros estados, continúan participando y asistiendo para presenciar este episodio bíblico, que se ha realizado 44 años de manera ininterrumpida.