Israel Cárdenas/Mérida
Comisarios ejidales de los municipios de Chocholá y Samahil, respaldados por un grupo de ejidatarios, protestaron ayer ante el Tribunal Unitario Agrario, Distrito 34, de Yucatán, para exigir que respete los actos jurídicos en los que comercializaron dos mil 200 hectáreas.

Los ejidatarios afirmaron que la Procuraduría Agraria intenta afectar el patrimonio de los nuevos propietarios de las citadas tierras, cuyos procesos se realizaron hace siete años, en el caso de Chocholá, y cuatro meses, de Samahil.

Lo anterior obedece a que cinco personas de Chocholá y tres de Samahil promovieron denuncias en contra de ambos ejidos ante el citado tribunal con el objetivo de dejar sin efecto las asambleas de cambio de destino en las que aprobaron ceder las tierras a particulares.

Ayer, la comisaria ejidal de Chocholá, Maritoña Flores Rosado, y el comisario ejidal de Samahil, Silverio Chacón Koyoc, comparecieron por separado por dichas denuncias ante el Tribunal Unitario Agrario, donde responsabilizaron al enlace de la Procuraduría Agraria en Yucatán, Alfredo Ramírez Gómez, de promover las denuncias para intentar desestabilizar los ejidos.

Indicaron que los actos jurídicos se realizaron conforme a derecho, con el aval de los ejidatarios e irónicamente con el procedimiento ante la Procuraduría Agraria. Ambos comisarios pidieron al Tribunal Unitario Agrario que deseche las denuncias.

Acompañada por un grupo de ejidatarios, Maritoña Flores precisó que en 2012 el ejido de Chocholá vendió 500 hectáreas a particulares por la cantidad de 10 millones de pesos, el citado ejido se integra por 565 personas y que a cada una le correspondió 19 mil 700 pesos.

Agregó que hace unas semanas cinco ejidatarios disidentes (Francisco Pech Uicab, Prisciliano Pech Tun, Pastor Quintal Osorio, Prudencio Euán Solís y Armando Martín Cocom) promovieron denuncias ante el Tribunal Unitario Agrario Distrito 34 en contra de la mencionada comercialización, aunque recibieron el pago por las tierras, como las demás personas.

“El enlace de la Procuraduría Agraria en Yucatán, Alfredo Ramírez Gómez, anda solicitando las actas de asamblea de Chocholá ante el Registro Agrario Nacional para que se impugnen, en particular la realizada en 2012, es decir, ya hasta venció el término para realizar dicho procedimiento, que es de 90 días, y ya pasaron siete años, y nos está causando un perjuicio en todo el ejido”, dijo.

El pasado 8 de septiembre, Flores Rosado ganó la elección a comisario ejidal de Chocholá, cargo que asumió el 6 de octubre pasado, y ejercerá un periodo de tres años.

“Como comisariado ejidal de Chocholá vinimos a comparecer por la denuncia, los cinco disidentes que interpusieron la denuncia están queriendo desestabilizar al ejido, pero no lo vamos a permitir, se trata de actos jurídicos que han quedado firmes”, advirtió.

Por su parte, el comisario ejidal de Samahil, Silverio Chacón Koyoc, declaró que el pasado 2 de junio la asamblea ejidal vendió mil 700 hectáreas por 68 millones de pesos, y autorizó el reparto de 480 hectáreas a los ejidatarios para hacer un total de dos mil 180 hectáreas en proceso de adjudicación. Agregó que este ejido se conforma por 442 personas, quienes aprobaron el acto jurídico validado por la Procuraduría Agraria.

El comisario Silverio Chacón dijo que con la asesoría del enlace de la Procuraduría Agraria en Yucatán, Alfredo Ramírez Gómez, hace unos días tres ejidatarios interpusieron denuncias en contra del ejido de Samahil ante el Tribunal Unitario Agrario, se trata de Lorenzo Balam Canché, Wilberth Sánchez Quintal y Gabino Dzib Uc.

“Tres ejidatarios interpusieron una denuncia en contra del ejido de Samahil, la gente está molesta, ellos no quieren decir lo que quieren porque sus derechos se les han respetado, la decisión de la venta de las tierras es de la asamblea y todos están de acuerdo, con excepción de estas tres personas, que no acudieron a la asamblea; vamos a defender nuestros actos jurídicos”, dijo Silverio Chacón.