Ana Hernández/ Milenio Novedades
MÉRIDA, Yucatán.- La SHCP, a través del Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE), sigue cobrando los adeudos pendientes, y ya remató en Yucatán al menos 161 inmuebles, con los que estableció la recuperación mínima de 44 millones de pesos de instituciones que han desaparecido. Aún todavía tiene 23 asuntos activos por ejecutar.

De acuerdo con la información proporcionada por la dependencia federal, Yucatán tiene aún varios asuntos pendientes que rematará el SAE para recuperar parte de los créditos financiados a través de diversas instituciones nacionales que están en proceso de liquidación y y de esa forma recuperar parte de los créditos pendientes.

En septiembre pasado, durante varios días, por orden del Juzgado IV de Distrito de Mérida, se publicó el aviso de remate de 161 inmuebles que tenían adeudos con el desaparecido Banco Nacional de Crédito Rural Peninsular S. N. de C., mejor conocido como Banrural, que está en proceso de liquidación.

La lista publicada señalaba que los 161 inmuebles en remate, por los cuales se manejó esperaban un ingreso base de 44 millones 912 mil pesos, se ubicaban en tres municipios, principalmente: uno en Progreso, con un valor base de remate de 10 millones 40 mil pesos; tres en Mérida, por un total de 19 millones de 320 mil pesos, según el avaluó previo, y los 157 restantes se ubicaban en Tizimín, con precios de 60 mil la mayoría, hasta 400 mil. El remate se realizó el 29 de septiembre pasado.

La Dirección Corporativa y Fiduciaria, que es parte del SAE y depende de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, señaló que en esta entidad federativa hay 23 asuntos activos en ejecución de sentencia, que de no resolverse con el pago de los créditos pendientes, la autoridad federal puede proceder hasta el embargo.

Información obtenida a través de transparencia indica que los ingresos de esos remates van a una “cuenta custodio”. Según la respuesta, los ingresos que obtiene la Dirección por depósitos de cuentas bancarias concentradoras, son por concepto de ingreso (enajenación de bienes, recuperación de cartera, remates, entre otros).

Internamente, el depósito es reconocido por el área generadora del ingreso que identifica el “Encargo” (entidad transferente, empresa en liquidación y/o organismo y concepto de ingreso), una vez que se identifique el ingreso, el recuso se transfiere a una cuenta específica, que en este caso corresponde a Banrural.

A nivel nacional, al menos 12 instituciones han sido desincorporadas y finiquitadas en su totalidad, ya no quedan embargos o remates pendientes por ejecutar, de esa lista al menos cuatro son conocidas y aún están en la memoria de los yucatecos, porque aún quedan algunos rastros de ellos, como es el caso de la Compañía Nacional Subsistencias Populares (Conasupo), las Bodegas Rurales Conasupo S.A. de C.V. (Buroconsa), Almacenes Nacionales de Depósito S.A. (Andsa) y la Productora Nacional de Semillas (Pronase). 

• De los inmuebles reclamados en nombre de Banrural en Mérida, algunos se ubican en el fraccionamiento Misné II.
• En Mérida, en la colonia El Porvenir, hay una bodega que lleva años cerrada y aún tiene como uno de sus últimos logos el nombre de Conasupo.
• Los ex almacenes de Andsa que habían en Mérida, en la ex salida a Progreso por Chuburná, se vendieron a una empresa transnacional que abrió una tienda. 

A remate

El Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) es un organismo descentralizado de la administración pública federal con personalidad jurídica y patrimonio propios, agrupado en el sector coordinado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), encargado de dar destino a los bienes y a las empresas improductivas para el Estado; es el encarga de las subastas.

Hace unas semanas, por primera vez Yucatán fue sede de su subasta nacional, entre los que incluso habían diversos artículos, desde joyas, relojes, vehículos, avioneta, casas y terrenos. Actualmente, este organismo tiene al menos tres inmuebles pendientes de remate en esta entidad, uno en Espita, con valor inicial de 210 mil pesos y otro en la comisaría meridana de Cholul, con un precio de arranque de 379 mil pesos, así como dos vehículos usados del IMSS que ya no son aptos para circular, por un precio total de los dos de 16 mil 55 pesos, uno es una Ford Mystique 1997 y la otra una camioneta Nissan

Estos inmuebles se rematan prácticamente como chatarra, la más cara es el segundo vehículo, por el cual el precio base es de casi nueve mil 500 pesos.