Cecilia Ricárdez/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- “Ser feliz es una decisión que se toma con valentía”, fue el mensaje principal de la emisión de ayer del programa radial Salvemos una Vida, trasmitido por Amor 100.1 FM, de Grupo SIPSE Radio.

Las conductoras Alis García y Mariliz Escalante tuvieron la visita especial del doctor Roberto Díaz y Díaz, donde invitaron juntos al público a hacer de la felicidad el propósito de año nuevo, para identificar y aprovechar mejor las oportunidades de la vida, basados en el objetivo de llenar su vida de paz, amor y esperanza. 

“Es un tema del que hay que hablarse todo el año, para ser feliz y hacer feliz a los que están alrededor, porque alguien en ese estado contagia a todos los que lo rodean”, comentó Alis Gracía, quien invitó a los radioescuchas a disfrutar cada momento y agradecer incluso las situaciones difíciles que eventualmente se convierten en maestros. 

Para aquellos días turbios en los que no se encuentra una solución y las personas viven episodios de depresión, o tienen pensamientos suicidas, Mariliz Escalante exhortó a pedir ayuda y servirse de apoyos como el que prestan los voluntarios de Salvemos una Vida, quienes están dispuestos a dar palabras de aliento los 365 días del año, las 24 horas del día, con tan sólo una llamada al 9453777 o directamente al 075.

“Crea y mantiene las ideas para ser feliz, esto depende de cuántas ideas positivas se meten al cerebro. Mi madre decía: esfuérzate por ser feliz y lo decía desde su silla de ruedas, con su mirada serena porque la felicidad no viene comprada, hay que buscarla, disfrutarla; es un asunto de valentía, porque si tienes una enfermedad también tienes el reto de ser feliz, porque incluso hay personas que creyendo que tienen todo, no son felices”, expresó el doctor Roberto Díaz.

Dijo que rendirse es fácil porque atrae la conmiseración, un estado cómodo en el que todos arropan a la víctima y ésta, a su vez, en lugar de ayudarse se hunde en una condición que lo estanca y no le provoca salir de la zona de confort. 

“Hay que levantarse, la vida está esperando; hay que buscar ilusiones y esperanza, hay un poema que dice en uno de sus párrafos. Estrena una ilusión todos los días, ábrele una ventana a la esperanza, nunca pierdas la fe y la esperanza, la vida hay que llenarla de la vida. La conmiseración perjudica, estar triste es fácil porque todos te apapachan, en avanzar y ser feliz está el reto, siempre hay que tener algo que hacer, amar y esperar”, abundó.

Respecto a la relación de la felicidad con Dios, señaló que esta conexión con un ser superior no libera a las personas de vivir momentos difíciles; sin embargo, cuenta con herramientas personales y espirituales para afrontarlos.

“Dios no vendrá para resolverte la vida, te da las semillas para que puedas construirla. No hay que caer en la modorra espiritual, eso lleva a la depresión y hasta el suicidio. No hay que sacar a Dios de la vida. La felicidad no consiste en hacer siempre lo que quieres, sino en querer lo que haces”, agregó.

Mariliz aportó la pregunta de ¿cómo ser feliz, cuando la persona vive el peor momento de su existencia? 

Roberto Díaz, recordó a Viktor Frankl, un psiquiatra que sobrevivió de los campos de concentración nazi, perdió a su familia y en ese marco pudo fortalecer su sentido de la vida y creó la logoterapia, una psicoterapia que propone que la voluntad de sentido es la motivación primaria del ser humano.

“Él (Viktor Frankl) cuanto atendía a pacientes como parte de la terapia les preguntaba: ¿por qué no te has suicidado? y cuando encontraban su respuesta, encontraban el sentido de la vida y allí tienen los primeros pasos para acercarse a su ser y a Dios, porque la enfermedad o la dificultad no somos nosotros, no es fácil, pero hay que seguir luchando; lo que impide ser felices, no es la escasez de bienes sino la insatisfacción de tener más. Cuando te das cuenta por qué alguien vive un sufrimiento, hay que preguntarse dónde está Dios en tu vida, cuando no está se vuelve más difícil. Dios da alegría, paz y optimismo, si niegas a Dios te niegas a la felicidad, qué tanto amor tienes en tu vida, qué tanto tienes a Dios en tu vida”, abundó.

Propuso la práctica Omar, un acróstico que reúne cuatro recomendaciones: oración, meditación, acción y reflexión.

“Como el cuento donde Dios era un vendedor y cuando alguien quiso comprar soluciones él dijo yo vendo semillas no soluciones, Dios no es una clave de teléfono para que nos atienda, Dios no es nuestro criado, nos vende oportunidades para ser felices. Queremos todo sin pagar el precio, todos quieren ir al cielo, pero nadie quiere morirse. La felicidad no está en nuestro destino, no estará cuando crezcan los hijos, se muera la esposa, cuando tenga tiempo, hay que construirla”, reflexionó el médico.