Óscar Chan/Mérida
El coordinador del programa de Zoonosis de la Secretaría de Salud de Yucatán, Daly Martínez Ortiz, alertó a la población yucateca de los animales ponzoñosos que con las altas temperaturas suelen salir de sus escondrijos en busca de “fresco”.

En entrevista, el especialista abundó que las serpientes podrían ingresar a las viviendas y agredir a sus habitantes, poniendo en riesgo su vida.

“Durante esta temporada cálida es común encontrar en las casas algún animal de este tipo, aunque es importante que los ciudadanos eviten a toda costa entrar en contacto con las serpientes para prevenir riesgos”, sugirió.

De acuerdo con el reporte epidemiológico de la Secretaría de Salud, hasta el 2 de este mes se habían registrado en Yucatán ocho casos de mordeduras de serpientes. Las víctimas fueron cinco hombres y tres mujeres. El año pasado, al mismo corte se tenía un registro de 11 casos.

Al respecto, Martínez Ortiz recordó que en la entidad hay solo cinco especies de serpientes que representan un riesgo para la salud pública por su veneno, entre ellas están cascabel, nauyaca, cuatro narices y huolpoch.

Explicó que en la Secretaría de Salud de Yucatán (SSY) se cuenta con antídotos que logran neutralizar el veneno, siempre y cuando la persona llegue en un tiempo no mayor a dos horas después de la mordedura.

“Si la persona tiene alguna comorbilidad, el tiempo disminuye. Los antídotos son diferentes, debido al tipo de veneno del reptil y es importante que, en caso de alguna agresión, se debe identificar que ejemplar lo causó”, expuso.