Cuídate de la neumonía; personas con enfermedades crónicas pueden tener secuelas pulmonares
Especialistas llaman a acudir al médico en caso de presentar esta enfermedad
MÉRIDA, Yuc.- Los cambios de clima que se han presentado en Yucatán, donde en los últimos días ha habido bajas temperaturas, pueden desencadenar diversas enfermedades respiratorias como la neumonía, que para personas con diversas patologías puede ser riesgosa.
“La neumonía es una infección tan frecuente que cualquiera la puede padecer, pero algunas personas tienen más riesgo. Ante cuadros respiratorios como los que se presentan en esta época invernal, lo mejor es acudir al médico”, aseveró Jorge Salas Hernández, integrante y ex director del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias.
La neumonía, menciona Salas Hernández, es la inflamación de los pulmones como consecuencia de la presencia de microbios; es una infección aguda causada por bacterias, virus u hongos.
Las más comunes son las infecciones bacterianas, entre las que destacan las producidas por Streptococcus pneumoniae, aunque también algunos virus pueden causar formas complicadas de infecciones respiratorias superiores, como el SARS-CoV-2 que provocó la pandemia de la Covid-19.
Síntomas
Dependiendo de la extensión del padecimiento se pueden registrar manifestaciones como dificultad para respirar, aceleración de la frecuencia respiratoria y cardiaca o fiebre, en intensidad variable de acuerdo con la gravedad.
Enfermedades crónicas
En quienes además padecen una enfermedad crónica como diabetes, personas con inmunosupresión y EPOC, se pueden exacerbar los síntomas de su padecimiento previo.
Por ejemplo, aquellos con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) leve, pueden presentar más tos, expectoración y dificultad para respirar; en los diabéticos se descontrola la glucosa, y en los hipertensos la presión arterial.
La diferencia entre neumonía y bronquitis la hace el diagnóstico radiológico: una radiografía de tórax muestra una mancha blanca en el pulmón del paciente, la cual significa que esa zona está inflamada debido a la infección.
Dicha alteración puede registrarse en una pequeña área, la mitad o en todo el órgano, o en ambos pulmones.
Tratamiento
El tratamiento es por vía oral y ambulatorio (en casa), sobre todo en las personas previamente sanas, o quienes no muestran gravedad mayor.
De lo contrario, se opta por manejo intrahospitalario para tratamiento intravenoso.
Una persona mayor, con diabetes, hipertensión y neumonía tiene riesgo de complicarse y de que la infección se manifieste en otros órganos; en esos casos es mejor anticiparse y hospitalizar.
Aunque generalmente se cura, es decir, el microbio se elimina y se acaba la infección, una inflamación severa puede dejar algún daño en los pulmones, como deformaciones en los bronquios.
“Si se detecta a tiempo y se trata de forma adecuada, el padecimiento no debe dejar secuelas”, finalizó Salas Hernández.
Con información de DGCS UNAM