Nalleli Calderón/Mérida
El director del Instituto de Movilidad y Desarrollo Urbano Territorial (Imdut), Aref Karam Espósitos, informó que la segunda etapa del proyecto de modernización del transporte público para Mérida denominado Situr, que incluye el desarrollo de los proyectos ejecutivos, presenta un avance de 40 a 50 por ciento.

Actualmente, al menos el 30 por ciento de las 224 rutas de transporte se duplican, se cruzan o compiten entre ellas, lo que genera que no sean óptimas, eficientes y que recorran largos trayectos disminuyendo la atención y servicio.

“La realidad es que se tienen muchas cosas, hay rutas que son similares pero se llaman de manera diferente, hay las que están divididas como los circuitos que son una sola y que no funcionan de manera integrada y muchas pasan por el mismo lugar; hoy tenemos una gran cantidad de rutas que se traslapan y que no son necesariamente óptimas y eficientes”, aseveró.

La segunda etapa del esquema, que busca directamente la planeación de las vías por donde pasarán los autobuses, carriles preferentes, los paraderos y controles para el conteo de usuarios y vigilancia de las unidades, comenzó en mayo pasado y en ella se invierten 120 millones de pesos.

“Tenemos ya levantamientos de las vialidades, obviamente hemos tenido que regresar muchas veces cuando encontramos alguna diferencia entre lo que aparece a nivel de vista georeferencial en mapas y lo que se levantó en campo y al mismo tiempo tenemos varias propuestas y analizamos con esa información de la demanda real cuáles serían las rutas, los dimensionamientos de éstas, que tipo de unidades se requieren para prestar el servicio de manera integral”, explicó.

Indicó que se prevé que la información que se requiere de proyectos ejecutivos se consolide antes de finalizar este año para posteriormente tener todo el planteamiento del sistema de transporte.

La instalación de tecnología en las unidades de transporte público ayudará a determinar la viabilidad de las rutas que se tienen en la actualidad, o en su defecto poder corregir algún inconveniente y, si cumple con todas las medidas requeridas, mantenerla en circulación en la misma zona.

“Hemos empezado a hacer mesas de trabajo y estamos en contacto con los concesionarios, así como actores que tienen incidencia en el sistema de transporte, no hemos llegado a la socialización pública dado que no tenemos un planteamiento claro de a dónde van a pasar la ruta, su nivel de cobertura o si disminuirán en las zonas”, explicó.