Tiendas de mascotas, tortura para los animales
El aislamiento en las jaulas los hace susceptibles de contraer enfermedades, además de causarles daños de socialización.
Alicia Carrasco/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- El presidente de la Asociación de Etología y Estudios Caninos de México, Rodrigo Salazar Touché, afirmó que nueve de cada diez animales exhibidos en tiendas de mascotas presentan problemas de comportamiento y susceptibilidad de contraer enfermedades como consecuencia del encierro en las primeras semanas de su vida.
Aseguró que el aislamiento en las jaulas disminuye el sistema inmunológico de las mascotas y provoca estrés crónico, por lo que al momento de dejarlas en libertad éstas se esconderán en algún recoveco de las casas, no comerán, vomitarán o presentarán crisis nerviosas, principalmente.
“La mejor forma de deteriorar a un animal es teniéndolo encerrado. Los perros pasan por ciclos de desarrollo a lo largo de su vida, en lo general por cinco etapas. Normalmente, cuando los animales están en las tiendas de mascota son cachorros, entre uno y seis meses de vida”, dijo Salazar Touché.
Precisó que en el periodo de vida de un canino, la cuarta semana es la más importante ya que es la etapa de la socialización, por lo cual debe estar en contacto con el medio ambiente, no encerrado en una jaula, ya que esto le genera problemas tanto físicos como mentales.
El especialista dijo que “un perro que está encerrado durante sus primeras semanas tendrá deterioro en su conducta, lo que no se pudo hacer en ese tiempo es difícil que se logre en otra etapa de su vida”.
Agregó que en su experiencia como profesional ha tratado un número importante de perros adultos que fueron comprados en tiendas de mascotas y las consecuencias de este maltrato es que el animal crea deterioros conductuales, como por ejemplo ansiedad, agresividad, trastornos obsesivos, como el perseguirse la cola, caminar de un punto a otro en la jaula, coprofagia, entre otras cosas.
“El estrés ocasionado por el encierro provoca en el perro que el sistema de defensas se debilite por lo que siempre va a ser más propenso a contraer infecciones. Un cachorro no debe contraer enfermedades, ya que es como un bebé”, indicó.
Daños irreversibles
Las mascotas enjauladas sufren daño físico porque se confina su alimento y agua, cuando los cachorros deberían alimentarse cuatro veces al día; la ración va de acuerdo con su peso y raza, mientras que el agua debe ser a libre acceso.
Sin embargo, en las tiendas de mascotas esto se controla para mantener las jaulas limpias para el público, ya que de proporcionarles alimento y agua necesaria, el perro estaría orinando y defecando y el personal tendría que estar limpiando.
Por lo que especialistas en la materia sugieren evitar la compra de animales en estos sitios, pero sobre todo concientizar a las personas y a los niños del por qué quieren una mascota, ya que no es un juguete e inclusive se puede aprender mucho de ellos. En el caso de los perros se puede aprender de la vida, la muerte, sexualidad con el tema de la reproducción, es compañía, entre otras cosas.
Otro problema que se presenta en sitios de venta de mascotas es que las personas caen en el engaño en lo que al tamaño de la raza se refiere, lo que incrementa el abandono, pues al crecer el perro no reúne los requisitos de compra.
Se sugiere que antes de tener un perro se acuda a los albergues y sean voluntarios durante los domingos.
Lucha contra el abandono
De acuerdo con especialistas en derecho animal, Yucatán se sitúa entre los estados donde cada vez es mayor la conciencia en cuanto al bienestar animal y tenencia responsable de mascotas.
Existen situaciones muy cotidianas en las que se violan los derechos de los animales e incluso se incurren en delitos, pero hasta ahora no se ha hecho nada al respecto; un ejemplo son las condiciones de los animales dentro de las tiendas de mascotas.
“Las tiendas de animales son una actividad legal evidentemente, pero desde mi punto de vista con tanto perro por adoptar, la compra de animales se debería restringir hasta conseguir un balance”, señaló Anna Mulá Arribas, especialista en derecho animal de la fundación Franz Weber de España.
Agregó que esta situación se debería restringir hasta que la sociedad estuviera más concientizada de lo negativo del abandono, y con el conocimiento de las medidas que se encuentran en la Ley de la Protección de la Fauna de Yucatán, así como la importancia de la esterilización como método de control de natalidad de estos animales.
Una de las medidas que se implementó en España es evitar la exhibición de animales en escaparates porque éstos generan una compra compulsiva y compasiva.
“Al comprar en una tienda las personas adquieren un animal sin tener en cuenta cuáles son las verdaderas necesidades de este animal, así como las responsabilidades que genera adquirir una mascota”, indicó la entrevistada.
Explicó que detrás de cada cachorrito en las tiendas de mascota, las madres de estos animales permanecen durante toda la vida enjauladas criando continuamente animales hasta que mueren de cansancio e inanición.
Apuntó que la ley asigna sus responsabilidades, pero la sociedad no puede mantenerse impasible por la gravedad de los hechos, “ya que el gran problema es la pasividad que existe en algunas administraciones públicas”.
Ignoran la ley
Marcia Lara Ruiz de Moreno, miembro del Consejo Consultivo de Protección a la Fauna del municipio de Mérida, reconoció que, a pesar de que se han creado leyes de protección a los animales, “no todas las personas conocen el reglamento en contra del maltrato animal y las autoridades tampoco la hacen valer”.
"Evidentemente hay una norma que no se está cumpliendo y que compete, en primer lugar, a la participación de la sociedad mediante las denuncias y hacer que la autoridad actúe”, señaló.
“Tenemos una Ley de Protección a la Fauna desde 1999 y un reglamento estatal para aplicarla, así como también una norma municipal”, precisó.
Explicó que en la reciente reforma al Código Penal se incluye el maltrato animal como delito, “por lo que las tiendas de mascotas que encierran animales incurren en ilícitos”.
“Si no se ha realizado nada en contra de estos negocios es porque no se ha denunciado, sin embargo, la autoridad municipal debe actuar porque existe un reglamento para proteger a los animales dentro de los límites de Mérida”, precisó.
Destacó que en el Estado no se ha reportado ninguna denuncia contra alguna tienda de mascotas, cuando en otras partes del país se llevan a cabo movimientos ciudadanos para garantizar el bienestar de los animales.