Nalleli Calderón/Mérida
El periodo vacacional ha dejado buena derrama económica a los hoteleros de la costa y a los dueños de cientos de casas que rentan durante este lapso.

Habitaciones con tarifas de mil 500 pesos por día y casas que se rentan por mil y hasta 100 mil pesos por uno o 30 días se ofrecen en la línea costera del Estado.

Como parte de un sondeo con encargados de hoteles de Progreso, Chelem y Chicxulub, ha sido buena la temporada vacacional de verano y la demanda es la esperada para la ocupación de cuartos. Sin embargo, coincidieron en que hay quienes llegan el mismo día para solicitar una habitación pero ya no tienen disponibles.

Con base en datos obtenidos, durante la semana la ocupación de cuartos de hotel está entre 80 y 90 por ciento, pero los fines de semana llega al 100 por ciento, pues es cuando más gente local o nacional aprovecha para estar en la playa con sus familias o amigos.

Comentaron que a pesar de que ahora hay más competencia con la renta de casas que ofrecen tarifas más bajas, eso no les afecta.

Como resultado del crecimiento de la demanda de cuartos de hotel en la costa yucateca, se notó que se ha incrementado el número de restaurantes y hoteles nuevos o en construcción en Progreso que probablemente, para el próximo periodo vacacional se sumarán a la oferta comercial para atraer a más visitantes.

Respecto a la demanda de las viviendas, hay algunas que mantienen sus letreros de “se renta” y el número de teléfono para comunicarse, pero hay otras que ya no tienen fechas disponibles sino hasta octubre próximo o para julio de 2020.

Con elevada afluencia, pero... sin comprar

A pesar de la elevada afluencia a los puertos, prestadores de servicio, restaurantes y vendedores ambulantes reportan que sus ventas han caído al menos 40 por ciento menos en comparación con el periodo vacacional del año pasado.

Comerciantes de Progreso, Chelem y Chicxulub coincidieron en que no ha sido el mejor periodo vacacional debido a que en sus ventas se refleja la mala economía que predomina en el país.

Reconocieron que cada vez hay más competencia y que la gente ya no está dispuesta a gastar mucho dinero pues tienen otros gastos, entre ellos, las fiestas de graduación de sus hijos y la compra de útiles escolares después de las vacaciones de verano.

También comentaron que ayer les afectó que no llegó crucero, lo que ayuda a tener mejores porque los extranjeros compran artesanías.

El visitante yucateco o nacional compra y gasta menos en artesanías porque prefiere invertirlo en la comida o botanas para pasar el día con su familia en la playa.

Una familia pequeña de tres integrantes gasta al menos mil pesos durante su visita en comida, bebidas, atracciones, renta de palapa, camastro o sombrilla para estar más cómodos.

Sin embargo, hay muchos que prefieren acudir con alimentos preparados desde casa para evitar gastar de más durante su estadía en las playas.