En Yucatán las iniciativas ciudadanas y estudiantiles para divulgar la ciencia y algunos centros de investigación casi siempre tienen, entre sus objetivos, fomentar las vocaciones científicas entre niños y jóvenes, favorecer la toma de decisiones de una ciudadanía más informada y hacer públicos aquellos avances tecnológicos y científicos que tengan mayor cabida en la vida diaria.

Las estrategias para divulgar la ciencia son muchas, las hay dependiendo de lo que se desee transmitir y construir después de estar con el público que se tenía pensado. En esta multiplicidad de posibilidades para llegar a las personas, el periodismo científico es una de esas maneras de comunicar la ciencia y un complemento necesario para los divulgadores. Daniela Tarhuni, egresada del Máster de Comunicación Social de la Investigación Científica por la Universidad Internacional de Valencia (España), ha sabido moverse de un escenario a otro, primero como reportera del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y después como divulgadora del Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY).

Ella misma comenta: “Gracias a mi trabajo en el Conacyt tuve un gran panorama de lo que se hace en ciencia en México, siendo éste el organismo público que coordina la política científica nacional”. Desde esos años Daniela desarrolló la capacidad de trabajo transdisciplinario que, como divulgadora, le servirían en la planeación y ejecución de actividades dentro del CICY y el Cephcis UNAM. “Adentrarme a diferentes campos científicos e instituciones me dio el impulso para seguir divulgando lo que se hace en México, porque en este país la ciencia tiene mucha pertinencia en la solución de problemas nacionales. Al igual que la ciencia básica, una fuerza muy importante, que permite ir avanzando hacia nuevos horizontes”, dice con seguridad.

Tarhuni no tuvo el contacto directo con los investigadores hasta que migró a Yucatán y entró a trabajar al CICY. “Me dediqué a apoyar a los científicos en el proceso de comunicación. Si bien este procedimiento se da naturalmente, para algunos puede llegar a ser complicado por el lenguaje tan especializado que manejan y porque están acostumbrados a presentarse en espacios que son completamente académicos. Entonces, los investigadores, mis compañeros de comunicación y yo nos esforzamos en sacar productos en televisión, radio y prensa escrita”, cuenta acerca esos casi seis años de labor.

La carrera de Daniela Tarhuni ha cambiado durante el paso del tiempo, del periodismo científico a la divulgación de la ciencia y ahora en ejercicio de las ciencias sociales y humanidades en el Cephcis UNAM, donde es jefa de área de extensión académica. Tiene a su cargo la logística y difusión de eventos sobre temas muy urgentes, tales como los derechos humanos, el suicidio y la violencia de género. “Son problemáticas que no nos gusta tratar, pero que es necesario que abordemos como sociedad”, menciona acerca de los diálogos con públicos no especializados que se han dado cita en las instalaciones del Cephcis.