¿Verdad o engaño?
El Poder de la Pluma.
Hablando en materia de seguridad social, mucho se dice y se pregona a los cuatro vientos que la autoridad reguladora del Sistema de Ahorro para el Retiro, la Consar, así como los institutos de seguridad social, brindan información a los trabajadores y público en general: muy clara, transparente y fácil de entender.
Dicen ellos que sus procesos son muy “amigables y sencillos”, e impulsan grandes programas para fomentar el ahorro de los trabajadores, especialmente la Consar y las afore, para que, a futuro, puedan tener una muy buena pensión.
Sin embargo, las verdades que dice la Consar y que los institutos de seguridad social deben seguir como directriz distan mucho de ser lo suficientemente claras, transparentes y accesibles, pues, al analizarlas, concluyes que las verdades que te expresan en esta materia resultan ser “verdades con sabor a engaño”, al darte a conocer “números alegres”, especialmente en las proyecciones de pensión.
Por consecuencia, para un trabajador, al carecer de datos reales, verdaderos, ciertos y transparentes, las “verdades que le dicen” se convierten en mentiras al no permitir las calculadoras de pensión que ponen a disposición de los trabajadores, en los portales electrónicos de la Consar, IMSS e Issste, proyectar con relativa certeza acciones a emprender en pro de una adecuada y anhelada pensión.
La calculadora de pensión que la Consar publica en su portal y pone a disposición de los trabajadores que cotizan al Seguro Social por Ley 1997, después de ingresar los datos que te pide el sistema, te arroja un resultado que te emociona y te alegra, al “ver” la gran pensión que recibirás al retirarte a los 65 años.
Si no estás familiarizado con la operación y funcionamiento del Sistema de Ahorro para el Retiro, al ver el resultado obtenido te quedas con esa idea, pero nunca observarás que el cálculo de la “pensión” no está hecho en la modalidad de rentas vitalicias y sólo los conocedores y analistas del sistema observan que en la parte superior de la pantalla, en letras chiquitas, hay una pestaña apenas perceptible que dice “Metodología”.
Al ingresar a esa pestaña y leer el contenido que muestra la “nota técnica”, descubres en los textos inferiores un escrito en letras “más que chiquititas” que dice que la proyección de pensión realizada corresponde a un “Retiro Programado” para pensionado de 65 años de edad, sin beneficiarios.
Al hacer el mismo proceso, en la calculadora del IMSS, mañosamente sólo permite hacer proyecciones por Ley 1973, no por Ley 1997 y, por consecuencia, los trabajadores de la llamada Generación Afore, a más de 24 años de haberse instaurado el nuevo sistema de pensión, no tienen forma de diseñar una estrategia para su pensión.
Triste, lamentable y frustrante.