Coral Díaz/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Ante los cambios registrados en la sociedad, algunas familias apartan a los adultos mayores al no darles su lugar y no escucharlos, por lo que éstos callan y aíslan por temor a que los hagan a un lado, indicó la coordinadora de Proyección Social de la Fe, María de los Ángeles Matos González.

Cabe señalar que datos de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en México indican que tres de cada cinco adultos mayores sufre agresiones en el hogar por desconocimiento, miedo o algún impedimento físico o mental, y la mayoría no denuncia ante las autoridades.

En la entidad, de acuerdo con el Consejo Nacional de Población (Conapo), los habitantes de más de 60 años son 263 mil 539, lo que representa el 13 por ciento de la población.

La especialista dijo que los adultos mayores deben recuperar su dignidad y su papel de persona que debe ser escuchada por los conocimientos y sabiduría que puede transmitir.

Explicó que la manera de rescatar su dignidad y sabiduría es, antes que nada, escuchándoles y brindándoles opciones, ya que los valores no pasan de moda, ni la manera de vivir.

“Es un problema que tienen que enfrentar las personas de la tercera edad, ya que poco a poco se le desecha y al joven tampoco se le cree, son dos sectores y hay que darles el lugar que merecen dentro de la sociedad”, apuntó.

Dijo que la tercera edad abarca una parte considerable de la población. Son personas que salen de los circuitos productivos, disponiendo aún de grandes recursos y la capacidad de participar en el bien común. 

“Es necesario no dejar que los sorprenda la tentación de la soledad interior. A pesar que las fuerzas progresivamente se debilitan, de las incomprensiones de una sociedad egoísta, los adultos mayores no deben sentirse al margen de la vida de la sociedad, ya que son sujetos activos de un periodo humana y espiritualmente fecundo, tienen una misión por cumplir y una contribución que dar”, refirió.

Se indicó que la calidad de la vejez dependerá de la capacidad de apreciar su sentido y su valor, tanto en el ámbito humano como en la fe. “Sólo a la luz de la fe, firmes en la esperanza, serán capaces de vivirla como don y como tarea, de manera verdaderamente cristiana”, dijo. 

Curso de verano

El primer curso de verano para la tercera edad, “Tesoro de la sociedad, aprender a envejecer requiere sabiduría y ánimo”, inició este lunes con el objetivo de ser un espacio de formación y de participación para desarrollar potencialidades personales y culturales, así como adquirir herramientas para vivir en plenitud este tiempo.

El curso, que promueve la parroquia del Señor de la Divina Misericordia de San Ramón Norte con el apoyo de Proyección Social de la Fe, está dirigido a los adultos mayores para darles opción de un espacio agradable, de entretenimiento y de encuentro donde se sientan a gusto.

“Sabemos que en el verano muchas veces los integrantes de la familia tienen diversas actividades y ellos no quieren participar, por lo que buscamos rescatar la sabiduría que tienen estos adultos mayores”, indicó Ana Cristina Zapata Vázquez.

La especialista, con más de 10 años de experiencia con el grupo Vida alegre y digna: tercera edad, señaló que el evento se realizará de lunes a viernes de 09:00 horas a 13:00 horas durante nueve semanas.

Para mayores informes sobre el curso se pueden comunicar con María de los Ángeles Matos al 9991635589.