MÉRIDA, Yucatán.- El Ayuntamiento de Progreso deberá pagar una deuda millonaria al Instituto de Seguridad Social de los Trabajadores del Estado de Yucatán (Isstey), luego de perder el laudo contra el Sindicato de Empleados y Obreros del Municipio de Progreso, en donde deberá asegurar a 130 agremiados de dicha agrupación de forma retroactiva.

Con límite hasta el día 9 de diciembre, el Ayuntamiento de Progreso, deberá dar respuesta y cumplir con la afiliación de una parte de los empleados municipales sindicalizados, luego de perder los dos laudos en contra del Sindicato de Empleados y Obreros del Municipio de Progreso que incluyen a un total de 130 agremiados de dicha agrupación sindical, lo que se traduce en una deuda millonaria con el Isstey, al tener que cubrir en este periodo las cuotas, recargos y actualizaciones del personal en cuestión varios de los cuales tienen hasta tres décadas laborando sin seguridad social.

La notificación del fallo fue entregado el pasado día jueves 26 de noviembre, con 10 días hábiles para poder dar cumplimiento a lo decretado por la autoridad, luego de que el Ayuntamiento presentara un amparo ante el Tribunal Colegiado en Materias de Trabajo y Administrativa del Décimo Cuarto Circuito, el cual ratificó el laudo dictaminado por el Tribunal de los Trabajadores al Servicio del Estado y Municipios de Yucatán, en favor del sindicato en cuestión.

Según se dio a conocer por parte de los abogados encargados de promover el juicio en favor del sindicato, en caso de incumplir con lo dictaminado el Ayuntamiento comenzaría a recibir diversas multas económicas, las cuales podrían ir escalando en magnitud hasta convertirse en delito de desacato por parte de la autoridad municipal.

Debido a que según señalaron los abogados, el Ayuntamiento ya ha gastado con este último amparo todos los recursos posibles para evitar el millonario pago; de tal suerte que el sindicato continuará con la presión para el cumplimiento de sus derechos laborales.

El juicio, según se indicó, inició en 2016 por el entonces dirigente sindical de esta organización Manuel Cortés Góngora, durante el mandato de su hermano José Cortés Góngora, con la idea de que a través de dicho lazo sanguíneo se pudiera llegar a un arreglo sin pasar por temas jurídicos, pero debido a que no se llegó a ningún acuerdo, en ese año se comenzó oficialmente la demanda, que continuó su curso hasta la resolución final en este mes de noviembre.