Más de 28 casos por día de intoxicación aguda por alcohol
La enfermedad ocasiona serios problemas de salud cuya atención resulta muy costosa en lo particular y para el sector público.
Coral Díaz/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- De las drogas legales, ilegales y de índole social la que sigue causando un mayor daño es el alcohol, que sigue siendo la única sustancia en la que Yucatán se encuentra por encima de la media nacional.
El secretario de Salud estatal, Jorge Mendoza Mézquita, señaló que la reciente encuesta estatal de adicciones reveló esta situación y aunque no es el objetivo de ese estudio, se tiene que poner atención en las patologías asociadas al consumo de alcohol, que afectan severamente la salud de los yucatecos y cuya atención resulta muy costosa.
“Es el caso de la cirrosis, con un alto índice de personas afectadas y también los accidentes, lo cuales son causa de mucha lesión permanente y a veces letal”, destacó.
Cabe señalar que en la Encuesta Nacional de Adicciones 2011 se encontró que el 6 por ciento de personas en el país desarrolló dependencia al alcohol, mientras que en la encuesta 2014 se encontró que el 8.1 por ciento de los bebedores cumplen con los criterios de dependencia.
Cuando se compara la encuesta estatal 2005, en la que no se reportaron menores de edad con dependencia al alcohol, en 2014 se encontró un 1.4 por ciento, otro sector vulnerable.
Relacionado con esto, en la estadística de casos de intoxicación aguda por alcohol, Yucatán se encuentra en primer lugar nacional desde hace varios años. Este año se registraron del 1 de enero al 21 de febrero mil 501 casos, de acuerdo con datos de la Dirección General de Epidemiología.
César García Valdez, médico internista del IMSS Yucatán, explicó que dependiendo de la cantidad de alcohol que se consuma es el daño que se puede generar.
Dependencia crónica
En el caso de la dependencia, cuando se vuelve crónica, se generan complicaciones a nivel hepático, ya que el hígado es el principal órgano que se daña por el consumo debido a que es ahí donde se metaboliza el alcohol y a largo plazo se dañan sus células.
El punto final al que se llega por el daño al hígado es la cirrosis hepática alcohólica, primera causa en la consulta en más de la mitad de los casos (la cirrosis también se puede desarrollar por hepatitis B y C, por depósito de grasas, entre otras causas).
La cirrosis hepática por alcohol refiere que este órgano genera una serie de cicatrices que hace que disminuya tanto de tamaño como de la elasticidad, por lo que se vuelve duro y no funciona adecuadamente.
“No solo cambia la morfología del hígado, sino también las funciones que realiza lo cual ya no se hace de manera adecuada”, apuntó.
El especialista dijo que cuando se presenta la cirrosis puede haber complicaciones secundarias y una de las principales cuestiones son los sangrados y la disminución en producción de células en el cuerpo.
También se puede dar la hipertensión portal, que ocurre cuando al hígado, al ser más pequeño y duro, el flujo sanguíneo ya no es el adecuado y no metaboliza otras sustancias necesarias, como hormonas y proteínas, porque no es fácil su paso y aumenta la presión en el hígado, por lo que otros órganos pueden crecer porque se congestionan de sangre.
“Crece el bazo, al hacerse más grande secuestra plaquetas y por eso disminuyen éstas en el paciente, también por el aumento de esta presión se forman varices en el estómago, esófago y existe un riesgo alto de sangrado, lo que es una de las causas principales de muerte en este tipo de pacientes”, apuntó.
Grado previo
- Existe un grado previo al daño hepático por alcohol, que se llama la esteatosis hepática por alcohol, de tal manera que el hígado se va llenado de grasas y esto va generando un daño.
- Dependiendo del estadio en que se encuentre al paciente son los pronósticos de su salud; si es un diagnóstico temprano con la suspensión del alcohol, que es lo que genera el daño, se puede revertir.
- Pero si está avanzado difícilmente se puede revertir, lo que se hace es retrasar que siga avanzando, hasta llegar a un punto fatal.