MÉRIDA.- El regreso a clases en su modalidad hibrida significa “oxígeno” para el sector comercial, principalmente para negocios como papelerías, librerías, sector del vestido y del calzado, que en las últimas semanas han registrado buenas ventas.

Tras afirmar lo anterior, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Mérida (Canacome), Iván Rodríguez Gasque, estimó la derrama económica por el inicio del ciclo escolar 2021-2022 en 595 millones de pesos, toda vez que en los primeros 15 días de este mes los padres de familia seguirán adquiriendo productos para completar las listas de materiales escolares que requieren sus hijos.

“En los números más recientes revisados con los socios de la Canacome tenemos un incremento en ventas de hasta un 70 por ciento, con una derrama estimada de 595 millones de pesos, lo que significa un respiro para el sector”, comentó.

Precisó que “son números y resultados positivos, desde luego incomparables con los del 2019, pero estamos avanzando en relación con los registros del año pasado”.

Para Rodríguez Gasque, el regreso a clases presenciales representa el 80 por ciento de los ingresos anuales del sector comercial, y gracias a ello muchos negocios del ramo podrán salvar sus establecimientos, luego de más de 12 meses de pocas o nulas ventas.

“Quisiéramos ir mejor, la realidad es que ha sido un proceso muy lento la recuperación, pero creemos que este año superaremos las ventas del 2020”, consideró el líder de los comerciantes organizado.

Como hemos informado, desde la semana pasada se registra una gran afluencia de padres de familia en los establecimientos comerciales del centro de la ciudad, para adquirir útiles escolares, uniformes y calzado para el regreso de sus hijos a las aulas.

Inversión para el retorno seguro

Con el regreso a clases, los directores de escuelas, sobre todo privadas, realizan un gasto adicional para reforzar la prevención contra el coronavirus.

El presidente de la Sociedad Yucateca de Ingeniería Sanitaria y Ambiental (Syisa), Abar Wilde Maldonado, dijo que los directores han buscado adquirir desde tapetes sanitizantes, termómetros y hasta aparatos para monitorear la calidad del aire, que van de tres mil 500 a ocho mil pesos.

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