Martiniano Alcocer/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Relevo generacional en las empresas, reindustrialización, conectividad, tecnología… son temas que preocupan y ocupan a los industriales yucatecos y su presidente, Mario Can Marín, afirma que la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) toma muy en serio y está trabajando de la mano con las autoridades estatales y municipales para hacerlos realidad. 

Yucatán no es un Estado con una poderosa industria manufacturera. Del total de su población económicamente activa (PEA) –978 mil 188 personas, a septiembre de 2015– apenas 170 mil 740 trabajan en esa rama de la economía. No hay ninguna empresa grande del sector instalada en la entidad al día de hoy, pero las perspectivas son de un cambio determinante a mediano plazo.

En este rubro, dice Can Marín, un dirigente con larga trayectoria en diversos cargos en Canacintra, la instalación de la Cervecería Yucateca en Hunucmá será un detonante y un partegauas por la gran inversión que representa y la infraestructura que generará, además de las industrias colaterales que se van a desarrollar en torno a la mega empresa cervecera.

Amigo de los números, no en vano es contador público –“para poner en contexto la realidad en la que nos encontramos”–, el dirigente expresa que en México 24.8 por ciento de la Población Económicamente Activa está ocupada en la rama industrial, en el sector primario (el campo) el 13.4 por ciento y en el terciario (comercio y servicios) el 61.21 por ciento Yucatán es de los estados con una PEA elevada (ocupa el quinto lugar) con casi el 63.5 por ciento de participación en la actividad económica.

-Según los datos más recientes (de septiembre) –expresa-, el sector industrial en México lleva un crecimiento del 1.4 por ciento a tasa anual y del .4 por ciento  respecto al mes anterior.

El Estado registra un crecimiento del 8 por ciento respecto del segundo trimestre y de 2 por ciento a tasa anual, muy por encima de la realidad nacional. Yucatán está siendo visto en el país como un Estado atractivo a la inversión, a la conectividad y con un alto nivel de certidumbre jurídica y de seguridad, tanto para empresas nacionales como transnacionales.

En este contexto, ¿dónde entra lo que se ha dado en llamar la reindustrialización del Estado?

-Canacintra vé este tema desde dos perspectivas: la atracción de inversión foránea para la industria, y como un tema local, que quiere decir que todos los inversionistas locales o los ya establecidos en Yucatán están haciendo mayores inversiones en su infraestructura y en procesos de modernización de su maquinaria y en sus procesos productivos y administrativos, todo encaminado a generar mayor productividad.

-En este apartado entra el asunto de la conectividad en todas sus vertientes: aérea, férrea, portuaria, carretera. Sobre todo la conectividad con el centro del país en busca de insumos más económicos y que nuestros productos lleguen a precios competitivos a los mercados internos y extranjeros.

-En ese mismo sentido, está nuestra agenda de vinculación y gestión con las instituciones de educación superior para, desde sus centros de investigación, desarrollar  nuevos productos como los que demanda el mercado: con bajo nivel calórico, amigables con el medio ambiente y tipo gourmet para clientes más específicos, y para preparar a los profesionales que demanda la industria, así como para los programas de capacitación en las empresas.

¿Este proceso incluye nuevos sistemas administrativos? La pregunta es porque en Yucatán hay muchas empresas familiares que a veces con las segundas generaciones fracasan, aunque hayan sido de mucho éxito con sus fundadores.

-Definitivamente. El tema de la sucesión en las empresas es algo que la Cámara tiene muy presente y nos apoyamos con despachos especializados, porque hemos visto que en este traslape es donde muchas empresas desaparecen.

Otro punto en la agenda de Canacintra, señala el dirigente, es el de la promoción de las empresas socialmente responsables (ESR) que trabaja desde la Fundación del Empresariado Yucateco que forma parte del Consejo Coordinador al cual están integrados los socios de la Cámara.

Asimismo realizan las gestiones para certificar los productos como aptos para el mercado interno y de exportación, sobre todo porque hoy existe mayor exigencia en este rubro, “por el asunto de las enfermedades que van surgiendo y que a veces obligan a los países a bloquear mercancías que consideran que no son totalmente inocuas ni aptas para el consumo humano”. 

De la primera a la segunda generación

El presidente de la Fundación del Empresariado Yucateco, A.C. (Feyac), Guillermo Mendicuti Loría, dice que apenas el 30 por ciento de las empresas familiares logra superar el traspaso de la primera a la segunda generación (de los padres fundadores del negocio a los hijos herederos).

En su negocio, Grupo Gamas, estableció un gobierno corporativo mediante el cual él y su esposa, Arlet Rufino Simón, forman el Consejo Consultivo, que ha delegado el manejo de las cuatro divisiones de la empresa en una administración que encabeza un director general.

El presidente de Canacintra, Mario Can Marín, considera que con estrategias similares –las cuales promueve entre sus socios la organización–, las empresas familiares de Yucatán pueden dar el salto al gobierno corporativo que garantizaría mayores posibilidades de permanencia.

Apertura

• Canacintra promueve entre sus socios la apertura a la modernización, para no quedarse fuera de los mercados nacionales y menos de los internacionales.