MÉRIDA, Yucatán.- Aunque el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Esteban Moctezuma Barragán, afirmó el martes que las clases presenciales podrían regresar en enero de 2021 en los estados que se encuentren en semáforo verde, en Yucatán el magisterio local estimó que en el mejor de los escenarios los alumnos podrían retornar a las escuelas hasta el arranque del ciclo escolar 2021-2022, una vez que se conozca de mejor manera la aplicación de los esquemas de vacunación contra el coronavirus Covid-19.

Como se informó, Moctezuma Barragán declaró en la quincuagésima primera reunión plenaria ordinaria del Consejo Nacional de Autoridades Educativas (Conaedu), que Chiapas, Campeche y Veracruz serían los primeros que podrían retornar a las actividades presenciales en las aulas, si las autoridades locales así lo decretaban.

Mientras que los estados que se encuentren en semáforo amarillo retomarían las actividades presenciales de asesoría pedagógica y socioemocional también en enero, a través de los Centros Comunitarios de Aprendizaje (CCA), los cuales se instalarían de manera voluntaria.

Erróneo pensar reabrir escuelas de Yucatán en enero

Sin embargo, en Yucatán el magisterio local consideró que, “dado que aún nos encontramos en semáforo naranja sería muy aventurado pensar que se podrían reactivar las clases presenciales a inicios del 2021, por lo que en el mejor de los escenarios se tendría un retorno escalonado hasta el arranque del siguiente ciclo escolar.

Johnny de Jesús Piña Castillo, representante de la agrupación “Educación Básica Nuevo Orden” en la entidad, indicó que el mejor escenario y el más seguro pinta para que las clases presenciales comiencen a retornar de forma escalonada en el ciclo 2021-2022, una vez que se haya cumplido con gran parte del esquema de vacunación contra el coronavirus.

Recordó que el Estado aún se mantiene en semáforo naranja e incluso aún se vigila el comportamiento de la pandemia para que no exista un incremento en los contagios o defunciones, por lo que sería erróneo pensar que las escuelas pudieran reabrir en enero, si las condiciones aún no lo permiten.

Y comentó que en el caso de los estados que sí podrían empezar otra vez con las clases presenciales en enero, los padres de familia llevarían a sus hijos de manera voluntaria, es decir que no sería obligatorio asistir, pues los papás y los maestros deberían firmar un documento en el que se comprometan a darle seguimiento al proceso de aprendizaje de los estudiantes.

“Hablamos de que en lo que se empieza la etapa de vacunación a las primeras unidades, y siendo realistas, hablaríamos de que en el mejor de los escenarios para Yucatán pinta para un regreso a clases hasta el siguiente ciclo escolar y hablando de un esquema más positivo, sería un retorno de forma escalonada”, consideró.