Ana Hernández/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Yucatán tiene el segundo archivo histórico más importante del país, además de que la cantidad y calidad de sus documentos en reguardo es tal que es sitio de interés y consulta de investigadores locales, nacionales e internacionales.

Su extensión es tal, que las cajas que contienen los archivos, apiladas una al lado de otra, miden cerca de cinco kilómetros, que es la distancia aproximada que va desde el estadio Salvador Alvarado a la Catedral de Mérida.

“Ciudadanos con algún interés particular, escritores, investigadores, docentes y estudiantes forman parte de las listas de consulta que acuden en busca de un documento o un acontecimiento que inspire historias y temas de libros o de investigación”, señaló el director general del Archivo General del Estado (AGEY), Antonio Sosa Mendoza, quien señaló que al año manejan un presupuesto de cinco millones 57 mil pesos.

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El funcionario estatal comentó que incluso recientemente se incorporó a la consulta del acervo el material sobre los propagandistas de la época del general Salvador Alvarado.

Indicó que por la importancia de los documentos que  tienen en resguardo y consulta, después del Archivo General de la Nación, es el segundo más importante a nivel nacional, pues tiene información de los estados de Campeche, Quintana Roo, Yucatán y Tabasco.

Sosa Mendoza explicó que la principal función del archivo es el resguardo de toda la información oficial que el poder Ejecutivo genera, para lo cual está dividido en dos áreas: la oficina de concentración y la de Archivo Histórico, pero también tienen informática, taller de restauración, sala de consulta y organizan una biblioteca especializada en textos sobre historia.

Indicó que este lugar es sitio de consulta de expertos de Estados Unidos e incluso de Rusia e investigadores locales y nacionales que realizan consultas de documentos sobre temas de interés en investigaciones históricas o libros que editan, aunque no siempre le otorgan al AGEY el reconocimiento que tuvo en su trabajo de investigación, pues considera que si esto ocurriera sería mayor el número de especialistas que recurriría a ellos.

En todos los espacios disponibles que tienen acceso enfatizan la difusión hacia el público en general, ya que les interesa que mayor número de personas conozca su existencia y el valor de los documentos que resguardan.

Explicó que la oficina de concentración es el primer punto al que llega la información que previamente ha sido clasificada en las dependencias de Gobierno, que son de interés para ser resguardada en el AGEY. Ahí los documentos son fumigados y se quedan 15 días.

Después se turnan a la oficina del Archivo Histórico, que contiene un acervo que data de finales del siglo XVII hasta mediados del siglo XX, ahí se aplica un proceso de organización  y catalogación para tener mejor control y facilitar su búsqueda a las consultas.

El AGEY tiene además un “archivo de archivos”, pues tiene documentos del Poder Judicial, del Congreso local, del Archivo Histórico Notarial, así como de los primeros libros del Catastro, del Registro Público de la Propiedad y del Registro Civil, que son cerca de 10 millones de hojas.

Temperatura especial

El área del Archivo Histórico es una sala especial que no sólo tiene un clima regulado a una temperatura de 21 grados, sino que además cuenta con deshumidificadores y alarmas contra incendio.

Hay, por ejemplo, ya restauradas, mil 200 fojas de agentes propagandísticos en la época del general Salvador Alvarado. Son documentos de 1915 a 1918 que explican las formas en las que tenían que llevar y traer información de todo el Estado, hablan de los riesgos en el trayecto y del censo de escuelas.

Para tener una idea del trabajo especializado que ahí se realiza, José Mauricio Dzul Sánchez, coordinador del Departamento Técnico del Archivo General del Estado, señaló que la labor de organización y clasificación que realiza el personal capacitado, es de acuerdo con los lineamientos  del Archivo General de la Nación, y en cumplimiento de las normas oficiales mexicanas, sobre la temporalidad de conservación de documentos y leyes en cuanto a los que debe conservar y desechar.

Por tener una idea, ellos pueden tener archivados documentación legal susceptible de ser conservada como facturas y pólizas hasta que concluya la vigencia. 

Entre los más recientes documentos que ya forman parte del Archivo Histórico están los de Cordemex, el Fondo de Apoyo a las Actividades Productivas de Yucatán, que salieron del archivo de conservación luego de estar 20 años ahí. Tienen información sobre iglesias de la época de la Colonia, de la religión, milicia, guerra y educación

Cada año, los trabajadores del Archivo General de Yucatán se encargan de revisar, seleccionar, recibir, catalogar y clasificar entre millones de hojas, los cientos o miles de hojas que deberán ser archivados y conservados.

El coordinador del Archivo Histórico, José Armando Chi Estrella, comentó que el documento más antiguo que tienen en resguardo data de 1685 y se trata de un asunto sobre tierras; por volumen, la información más grande que ahí se resguarda es la que corresponde al Poder Ejecutivo y sus diversas dependencias; principalmente el Catastro, el Registro Público y el Registro Civil.