MÉRIDA, Yuc.- Mérida mantiene su afición a los casinos: el corte al 30 de septiembre pasado revela que durante los primeros nueve meses del año, los jugadores pagaron en las casas de apuestas de la entidad al menos mil 125 millones de pesos.

El director de la Agencia de Administración Fiscal de Yucatán (AAFY), Carlos Pasos Novelo, señaló que el reporte de ese ingreso a las arcas estatales marca 112 millones 592 mil pesos, un ligero incremento en comparación al mismo lapso de 2016; sin embargo, el aumento de cerca de 600 mil pesos no es significativo, por lo cual están evaluando si es el incremento real o hay algún pago pendiente que se reflejará en el corte de este mes.

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La ley estatal establece que por cada recarga que el jugador realice en estos centros de apuestas se le debe cobrar un impuesto del 10% que la empresa pagará a la tesorería estatal, en Yucatán, y concretamente en la ciudad de Mérida, funcionan seis casinos, en los cuales, de acuerdo a esos reportes, las apuestas de los jugadores representan cada mes unos 12 millones 110 mil pesos en promedio.

Pero si el total del pago del impuesto se divide por el número de casinos que reporta la Secretaría de Gobernación tienen establecimientos autorizados, entonces esto significa que en promedio cada uno pagó por ese derecho 18.7 millones de pesos, que indican que en sus instalaciones las apuestas son por al menos 180 millones de pesos cada mes.

A estos ingresos falta sumar los 45 millones de pesos, (7 millones más que los obtenidos en el mismo lapso el año pasado) por los servicios de vigilancia y máquinas de juegos, que se trata del derecho a instalar los equipos en los que se realizan las apuestas. Este aumento se debe en parte a la reapertura reciente de un casino y a que otros han aumentado el número de equipos.

Datos de la Dirección General de Juegos y Sorteos de la Secretaría de Gobernación indican, según su reporte de las salas de sorteos de números y centros de apuestas remotas, que en Mérida hay un permisos vigente que no se está ejerciendo; está en poder del permisionario Apuestas Internacionales S.A. de C.V., quien cerró el negocio en esta plaza.